El Consejo Mundial de Deporte de Motor decidió el pasado viernes en Barcelona que los motores de cuatro cilindros y 1.6 litros podrían introducirse más allá de 2013 a petición de algunas escuderías, fabricantes y proveedores. En la reunión, la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) anunció que se llevarán a cabo nuevas consultas con los protagonistas de la Fórmula 1 para así, considerar una nueva fecha de implementación de la normativa.

Sin embargo el presidente de la FIA, Jean Todt, ha señalado que Renault, uno de los cuatro proveedores de motor abandonaría la competición si la nueva reglamentación se retrasa y no entra en vigor en 2013 tal y como estaba previsto. "Cuando hablo con los responsables de Renault, me dicen que se irán de la F1 si el nuevo motor no llega en 2013", afirma Todt en el diario Sport.

El francés añade que Ferrari y Mercedes son los que están llevando la voz cantante en cuanto a la propuesta de retrasar este movimiento. Todo indica que de los cuatro proveedores, Renault es el único que apoya la introducción de los motores de cuatro cilindros de aquí a dos temporadas. Para el presidente de la FIA, la situación es frustrante. "Son ellos los que propusieron la reglamentación, y nosotros fuimos quiénes lo aceptamos. La propuesta no cayó del cielo; tuvimos once reuniones con todos los representantes involucrados. Cuando hablo con Mercedes y Ferrari, me piden que posponga la introducción un par de años. No están en contra de las normas sino que quieren posponerlas. Así que en los próximos días seguiré en contacto, personalmente, para ver donde estamos", aseguraba Todt.