En los últimos tiempos hemos asistido a una buena cantidad de propuestas en ese prometedor mercado de vehículos aéreos de pequeño tamaño en el que tanto startups como veteranos de la industria del motor han presentado sus primeros conceptos o incluso ya prueban sus modelos en un avanzado estado de desarrollo.
Boeing no podía faltar a esta fiesta y nos ha presentado su PAV (vehículo aéreo autónomo de pasajeros) y como revela en este vídeo ya es capaz de volar sin problemas haciendo uso del cada vez más famoso sistema VTOL. Así este Boeing PAV, desarrollado en colaboración con la compañía Aurora Flight Sciences, es capaz de despegar y aterrizar verticalmente gracias a unos motores eléctricos que hacen que se levante del suelo como una especie de helicóptero.
Las pruebas, destinadas a comprobar el buen funcionamiento de sus sistemas autónomos y de control en tierra, se ha realizado en Manassas, Virginia. Allí este pequeño avión consiguió depegar y mantenerse flotando en el aire antes de volver a aterrizar. Algo que tiene mucho mérito si tenemos en cuenta que este projecto de Boing ha pasado de ser un diseño conceptual a algo así de funcional en solo un año.
Ahora sin embargo parece que queda lo más complicado, ya que Boeing se centrará ahora en comprobar la correcta transición desde el despegue vertical al vuelo horizontal ya como un avión corriente, según la compañía aeronáutica la fase más compleja para cualquier máquina VTOL de cara alcanzar altas velocidades en un futuro. Queda por tanto mucho camino por delante, de hecho Boeing no ha hablado aún de potencias ni autonomías de este PAV.
Boeing Next espera formar parte de una campo en el que cada vez más compañías se están fijando: Geely y Volvo con Terrafugia, Audi, Mercedes, Toyota, Aston Martin e incluso Rolls-Royce han presentado su propias propuestas para un futuro en el que parece que acabaremos moviéndonos volando.
Especializado en el mundo del motor, la competición y la tecnología, Antonio Ramos Ochoa es redactor de Car and Driver. Se comenta que antes de bajarse del carro ya iba diciendo el nombre de los coches que iba viendo por la calle. Unos cuantos años después sigue hablando de una de sus pasiones aquí. Aficionado al Motorsport, el cine, videojuegos y la historia, incluso se desfoga de vez en cuando al volante de un kart o un simulador.
