Lo anunciamos hace apenas una semana y hoy se ha hecho ofical. El consorcio Volkswagen, a través de su marca Audi ha adquirido Ducati, la popular casa italiana de motos.
Por tanto, Audi traslada al mundo de las dos ruedas su competencia con BMW, donde esta última ya cuenta con una importante presencia a través de su propia marca y también con la sueca Husqvarna, que adquirió al grupo MV Agusta a mediados de 2007.
Según informaron fuentes cercanas a la operación, el importe de la adquisición incluye la deuda de la corporación transalpina, que cuenta con un pasivo de menos de 200 millones de euros. Audi e Investindustrial podrían haber acordado retener el mismo precio de compra en el comunicado, que tienen pensado emitir tras la junta anual de accionistas del consorcio Volkswagen que se celebrará en Hamburgo (Alemania).
El interés de VW en la marca italiana no es nuevo. En 2008, el entonces presidente del grupo, Ferdinand Piëch, aseguró que había sido un error no hacerse con Ducati en los años 80, cuando estuvo a punto de desaparecer. La operación resurgió cuando, a comienzos del mes de marzo, la familia Bonomi -accionistas mayoritarios en Ducati a través del fondo de inversión Investindustrial- hizo pública su intención de vender su participación. El objetivo, más que "buscar liquidez", era integrar la compañía «en un gran grupo industrial que diese el "apoyo necesario para garantizar su crecimiento". El precio de venta puesto por la familia Bonomi era de unos 1.000 millones de euros, el triple de su aportación inicial.
Inicialmente, en el elenco de pretendientes se hablaba incluso de la india Mahindra, aunque el mejor colocado parecía ser Mercedes-Benz que, a través de su división AMG, tiene acuerdos de colaboración con Ducati, finalmente no ha sido así.
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