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Ferrari no ha competido por en la categoría reina de Le Mans desde hace 50 años, pero el legado de la marca, antes incluso de ser lo que es en Fórmula 1, se basa en su éxito en el clásico de Resistencia francés durante sus dos primeras décadas de existencia. Esa familia de grandes coches terminó con el 312 PB, una barqueta con motor 12 cilindros plano, lo que lo convirtió en uno de los coches más importantes en la historia de la famosa marca. Con ese significado detrás, uno acaba de venderse por más de 12 millones de euros tras una reciente subasta de RM Sotheby's.
Un coche exitoso de Maranello al que solo se le escapó Le Mans
Si bien el 312 PB nunca ganó Le Mans, este modelo en particular ganó dos carreras en su camino hacia el Campeonato Mundial de Sport Prototipos de 1972. También fue conducido por los pilotos de fábrica Ronnie Petersen y Tim Schenken y logró la pole en tres ocasiones. Al final de la temporada, varios Ferrari 312 PB ganaron todas menos una carrera durante esa temporada de 11 eventos; desafortunadamente para Ferrari, esa única derrota se produjo en las 24 Horas de Le Mans.
Después de su trayectoria en competición, este chasis en particular pasó a manos privadas, concretamente las del ex piloto del equipo Ferrari en Norteamérica, Harley Cluxton. Tras años pasando de manos entre otras tantas colecciones privadas, la unidad ha conservado un motor y una transmisión que coinciden con los números, lo que lo hace inusualmente original para ser un coche de carreras histórico.
La esencia del 312 PB sigue viva en el nuevo 499P
El 312 PB es un modelo que además se ha puesto de actualidad en este último año, con Ferrari reviviendo su programa de carreras de prototipos inactivo durante mucho tiempo con su nuevo hypercar Ferrari 499P, cuyo acabado exterior replica en parte el del 312 PB, con esas franjas color amarillo sobre una elegante carrocería roja. Con este acabado ha iniciado ya su camino en el Mundial de Resistencia FIA 2023 (WEC) y participará en las 24 Horas de Le Mans de este año que llegarán en dos semanas y serán la edición Centenario de la clásica carrera francesa.
Así con la historia del 312 PB más presente que nunca y el valor añadido que supone siempre cualquier Ferrari, más aún si es un clásico de competición, no resulta tan extraño que alguien haya decidido parar más de 12 millones de euros por este ejemplar.
Especializado en el mundo del motor, la competición y la tecnología, Antonio Ramos Ochoa es redactor de Car and Driver. Se comenta que antes de bajarse del carro ya iba diciendo el nombre de los coches que iba viendo por la calle. Unos cuantos años después sigue hablando de una de sus pasiones aquí. Aficionado al Motorsport, el cine, videojuegos y la historia, incluso se desfoga de vez en cuando al volante de un kart o un simulador.
