El departamento australiano de Policía de Victoria tiene un nuevo agente a su servicio. Se trata nada menos que de un BMW M5 Competition que a partir de ahora se unirá a las Fuerzas del Orden de la ciudad australiana para combatir el crimen.

El sedán deportivo bávaro es la última adquisición de la policía australiana como coche patrulla para zonas de autopista y se une a otros dos 530d que llegaron ya el pasado año, demostrando que este departamento tiene una estrecha relación con BMW.

BMW M5 Competition Victoria Police Australia trasera
BMW Australia

Como puede verse en esta imágenes el modelo llega totalmente preparado para su nueva función con la decoración habitual del la Policía de Victoria y equipado con luces estroboscópicas tanto sobre el techo como en la parte delantera en las tomas de aire.

BMW M5 Competition Victoria Police Australia frontal
BMW Australia

Aunque como no podía ser de otra manera si por algo va a destacar este coche patrulla es por su velocidad. Gracias a un motor V8 4.4 TwinTurbo con 625 CV y 750 Nm de par máximo, directo a los dos ejes con el sistema xDrive a través de una transmisión automática de ocho velocidades, con el que el sedán es capaz de acelerar desde parado hasta los 100 km/h en solo 3,3 segundos y llegar a una velocidad máxima de 250 km/h. Aunque si cuenta con el M Drivers Package la velocidad llega hasta los 305 km/h. Unas prestaciones con las que ningún ifractor podrá librarse del peso de la ley.

A pesar de que en Australia este BMW M5 Competition tiene un precio de partida de 230.000 dólares australianos, 143.420 euros al cambio, lo curioso de todo es que a la policía australiana no le ha costado un duro, ya que se se trata de un préstamo para los próximos 12 meses.

BMW M5 Competition Victoria Police Australia lateral
BMW Australia
Headshot of Antonio Ramos Ochoa
Antonio Ramos Ochoa

Especializado en el mundo del motor, la competición y la tecnología, Antonio Ramos Ochoa es redactor de Car and Driver. Se comenta que antes de bajarse del carro ya iba diciendo el nombre de los coches que iba viendo por la calle. Unos cuantos años después sigue hablando de una de sus pasiones aquí. Aficionado al Motorsport, el cine, videojuegos y la historia, incluso se desfoga de vez en cuando al volante de un kart o un simulador.