El Nissan Pivo, en su tercera generación, aterriza en el Salón de Tokyo que estos días se celebra en Japón. Respecto a sus antecesores, presenta una estética más agraciada y próxima a la de un vehículo salido de la cadena de montaje. A diferencia de sus hermanos, el Pivo 1 y Pivo 2, éste de tercera generación tiene un habitáculo para tres ocupantes (uno delante y dos detrás) transportables en menos de tres metros de longitud y carece del sistema de ruedas que permiten aparcar de forma lateral de los prototipos 1 y 2.
Con estas características, el Pivo 3 sería un rival directo del Toyota iQ, no así del actual Smart Fortwo, que con sus 2,70 metros de longitud ofrece solo dos asientos. Además, su unidad propulsora es totalmente eléctrica de la mano de cuatro pequeños propulsores, colocados uno por cada rueda. Su sistema de alimentación y las baterías de ión-litio que emplea son similares a las del Nissan Leaf.
En el apartado de tecnología, Nissan ha desarrollado una aplicación con la que el conductor del Pivo 3 llamaría a su coche estacionado y, con la cual, éste arrancaría e iría a buscar a su dueño.
