Antes de que se anunciara que Carlos Sainz se convertía en piloto oficial de Fórmula 1 en busca de disputar la temporada 2015 como piloto oficial de Toro Rosso, se hizo público el abandono de dicho asiento por parte de Jean-Éric Vergne, quien todavía tiene un futuro incierto, pero que apunta hacia el otro lado del charco.

"Estaría muy interesado en competir en Estados Unidos, en IndyCar. Considero que es un gran campeonato", aseguró Vergne después de los rumores que le sitúan en el equipo de la familia del campeón del mundo de F1, Andretti, o Ganassi.

"Estoy trabajando con un mánager que trabaja con algunos pilotos en America (Julian Jakobi), y por el momento parece complicado ir directamente a un gran equipo, pero estoy muy interesado en ver qué tipos de asientos están disponibles", agregaba Vergne.

Otra posibilidad que se barajaba sobre el futuro del francés de 24 años era ser piloto reserva en el equipo Williams de F1, sobre todo en vistas de los rumores, ya desmentidos por la propia escudería, de la marcha de Valtteri Bottas a Ferrari en 2016.

"Realmente no me amargó dejar Toro Rosso. Tengo otras opciones en Fórmula 1, pero quiero ir a un campeonato en el que pueda ganar carreras y campeonatos de nuevo", insistía Vergne. "Mi objetivo es luchar por el título de IndyCar en mi primer año".

Aunque el ex compañero de Daniil Kvyat reconoce que no será un camino fácil conquistar las tierras americanas de circuitos, en su mayoría con una simple forma ovalada. "No pretendo ganar de forma fácil o tener una estancia placentera en los óvalos. Hay mucho que aprender viniendo de Europa, pero muchos pilotos europeos han sido muy buenos en los óvalos con algo de experiencia, y sé que puedo ser muy efectivo", concluyó el francés ex de Toro Rosso.