Nacionalidad: Gran BretañaCiudad nacimiento: Hertfordshire
F. nacimiento: 07 Enero 1985Peso: 66 kg
Altura: 174 cmDebut: 2007
Equipo debut: McLarenDorsal: #44
GPs disputados: 332Títulos: 7
Victorias: 103Vueltas rápidas: 65
Puntos: 4.639,5Poles: 104
Web oficialPodios: 197
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Últimas noticias de Lewis Hamilton

Palmarés de Lewis Hamilton en F1

AñoDorsalEquipoMotorNeumáticosChasisPos.Vic.Pod.PolesV.R.Ptos.GPs
202344MercedesMercedesPirelliW143-61423422
202244MercedesMercedesPirelliW136-9-224022
202144MercedesMercedesPirelliW12281756387,522
202044MercedesMercedesPirelliW111111410634716
201944MercedesMercedesPirelliW10111175641321
201844MercedesMercedesPirelliW091111711340821
201744MercedesMercedesPirelliW08191311736320
201644MercedesMercedesPirelliW072101712338021
201544MercedesMercedesPirelliW061101711838119
201444MercedesMercedesPirelliW05111166738419
201310MercedesMercedesPirelliW044155118919
20124McLarenMercedesPirelliMP4-274477119020
20113McLarenMercedesPirelliMP4-265361322719
20102McLarenMercedesBridgestoneMP4-254391524019
20091McLarenMercedesBridgestoneMP4-245254-4917
200822McLarenMercedesBridgestoneMP4-231510719818
20072McLarenMercedesBridgestoneMP4-2224126210917

Biografía de Lewis Hamilton

Lewis Carl Davidson Hamilton nació el 7 de enero de 1985 en Hertfordshire, Inglaterra, a no mucha distancia de la capital. Desde su infancia mostró gran interés en el automovilismo, practicando karting desde muy joven, logrando llamar la atención de Ron Dennis, que lo incorporó al programa de jóvenes pilotos de McLaren en 1998, dotando de solidez económica a su formación en categorías de promoción.

Con una exitosa trayectoria previa, Hamilton vería hecho realidad su sueño de debutar en Fórmula 1 en 2007, tras ganar la GP2 Series. El británico protagonizaría un movimiento poco habitual, que es el aterrizar directamente en uno de los equipos con más nombre de la categoría; McLaren.

La apuesta casi le sale bien a Ron Dennis, que rozó el título de pilotos después de muchos años, y que además hubiera supuesto el campeón más joven, el campeón debutante, y el primer piloto de color en lograrlo. Sin embargo, un fallo en la última carrera de la temporada dejó el título en manos de Kimi Raikkonen. Lewis se resarciría al siguiente año, logrando el título de campeón del mundo en un agónico final con Felipe Massa.

Tras varios tira y afloja con McLaren, Hamilton decidió dar por finalizada su etapa con el equipo británico, fichando en 2013 por Mercedes. En 2014, con el cambio de reglamento, se iniciaría una etapa dominada por Mercedes en la que Hamilton ha aumentado sus títulos de campeón del mundo hasta siete y ha batido los récords de podios, victorias y poles hasta cifras impensables.

A finales de 2020, la Reina Isabel II de Reino Unido nombra caballero al piloto, que pasa a ser conocido como Sir Lewis Hamilton.

2023 (Mercedes; 3º, 234 puntos)

Año nuevo para Hamilton con el objetivo no solo de revertir 2022, su peor temporada en Fórmula 1, sino de volver a luchar por el título tal y como lo había hecho en 2021 así como en años venideros. Mercedes comenzó sin querer desprenderse del todo de la filosofía de pontones minimalistas, como queriendo darle una última oportunidad.

Sin embargo, el rendimiento no fue el esperado. No era malo, no tenía una falta de competitividad como estaban teniendo McLaren o Alpine, simplemente no parecía tener el potencial de Red Bull. En Bahréin, Hamilton comenzó con un quinto puesto, superado por Red Bull, por Fernando Alonso y por un Ferrari, pero sumando.

Como quinto puesto en Arabia Saudí. En Australia llegó el primer podio del año, con un segundo puesto el cual invitaba a soñar. Pero el vehículo parecía adolecer de problemas similares al W13, sufriendo en una serie de pistas. Por eso no extrañó que Hamilton brillase en España, mismo lugar donde tuvo la primera carrera buena en 2022. También lo hizo en Canadá, con un tercero, y en Gran Bretaña, con otro podio.

Un cuarto puesto por aquí, dos sextos por allí, un nuevo podio en Singapur a apenas unas décimas del ganador de la prueba, un quinto en Japón, y entonces Qatar. Decimoséptima carrera de la temporada y primer error grave de Hamilton, que calculó mal e impactó contra su compañero de equipo en la salida.

Hasta ese momento, muy pocos errores achacables a Lewis, algo que no siempre se ha podido decir en temporadas anteriores, incluso en las que dominó a placere. Sin hacer ruido, sin dejar de sumar, Hamilton estaba firmando una de sus mejores temporadas en Fórmula 1, razón por la que a esas alturas aún seguía vivo en la lucha por el subcampeonato.

Tras Qatar, gran resultado en Austin que se vio ensombrecido por la exclusión al no pasar las verificaciones técnicas. Lewis se resarció en México con un segundo puesto en el que también certificó la tercera posición en la clasificación general y entonces sí, en un momento donde no le quedaban grandes alicientes, su rendimiento parecía caer ligeramente con un octavo, un séptimo y un noveno, emborronando ligeramente lo que estaba siendo una temporada excelsa del británico.

Seis podios y 234 puntos sumados para acabar tercero en la clasificación general de pilotos. Sin embargo, 45 carreras sin subir al cajón más alto del podio supone la racha más larga sin victoria para el siete veces campeón. De hecho, es más del doble que su anterior racha más grande sin ganar.

2022 (Mercedes; 6º, 240 puntos)

Hamilton quedó terriblemente contrariado tras el polémico final de temporada 2021. El título que lo pudo haber cambiado todo, pues no eran pocas las voces que apuntaban a que el británico pondría fin a su carrera en Fórmula 1 tras lograr el octavo título y quedarse en solitario como el más laureado de todos los tiempos. Pero no ocurrió.

Lewis, que guardó un total silencio durante meses hizo finalmente su aparición para afirmar que estaba más motivado que nunca y que este 2022 se vería su mejor versión. Hamilton decidía permanecer en Fórmula 1 y tratar de devolverle el resultado a Max Verstappen o a quién fuera que pudiera ser su rival, pues con un nuevo reglamento técnico, todo se abre.

Mercedes se presentó en Bahréin con un vehículo que dejó al paddock sin palabras. Habían minimizado al máximo los pontones, dando con un diseño totalmente diferente al resto y que despertó felicitaciones de campeón incluso antes de ponerse en pista. Pero el diseño no funcionó. El W13 no era suficientemente rápido e incluso la unidad de potencia Mercedes parecía faltarle la potencia de antaño, si bien esto también correspondía a la necesidad de poner más carga aerodinámica en los alerones para compensar las deficiencias del vehículo.

Los más escépticos se negaban a creer que Mercedes estaba en problemas, afirmando que iban de tapados. Pero los peores presagios para los aficionados del piloto británico llegaron la carrera inaugural del año, donde, a pesar de subir a la tercera posición del podio, tuvo que estar más pendiente de lo que le venía por detrás, que de luchar por la victoria con los Ferrari y Red Bull.

En Arabia Saudí ocurrió uno de esos momentos que tanto daño le hicieron en 2021, ir hasta el extremo buscando un set-up que le permitiera ir rápido, dando como resultado un rendimiento tan horroroso que Lewis se tuvo que conformar con la décima posición, muy lejos de su compañero, quinto. En Australia volvía a las posiciones de cabeza, cuarto, pero de nuevo, por detrás de Russell, recién llegado al equipo y que parecía encontrarse más cómodo con este vehículo que ya no era ganador.

La situación no mejoró en Imola, con los dos Mercedes fuera de la Q3 y sin poder remontar en las 21 vueltas de la carrera de clasificación. La carrera principal no fue mal para Russell, que subía a la cuarta posición, pero Hamilton no encontró el ritmo ni la forma de adelantar a los rivales, quedándose decimotercero, con vuelta perdida, por detrás de Stroll, Albon, y Gasly. En Miami, Hamilton volvió a la senda de Bahréin, acabando la carrera sexto aunque de nuevo tras su compañero.

España fue no obstante un punto de inflexión. Tras un comienzo de carrera abrupto, teniendo que parar en boxes tras un toque con Magnussen, el piloto quería tirar la toalla, pero el equipo le forzó a seguir, traduciéndose esto en un ritmo increíble en una tanda larga con la goma media que le permitió remontar al quinto lugar. Por primera vez en la temporada el Mercedes revelaba que tenía potencial escondido, algo en lo que creer.

El resultado no se pudo replicar en el siempre complicado circuito de Mónaco, con un octavo lugar, pero en Bakú ya volvieron a estar por encima del resto de la parrilla con las excepciones de Ferrari y Red Bull, pero con los fallos de fiabilidad de los de Maranello, Hamilton subió al cuarto puesto, eso sí, de nuevo por detrás de Russell.

Con ocho carreras disputadas, Hamilton solo había finalizado por delante de su compañero en la inaugural, por lo que los comentarios en contra se dispararon. ¿Era el Hamilton de antes? ¿Seguía centrado después del complicado año 2021? El piloto seguía centrando la atención, pero en este caso más por sus continuas quejas sobre el ‘porpoising’, creyendo Mercedes que les afectaba más a ellos que al resto, que por sus resultados. Fuese como fuese, Lewis parecía contestar a sus detractores con una racha de cinco podios consecutivo. Tres terceros puestos en Canadá, Silverstone y Austria, y dos segundas posiciones en Francia y Hungría.

Hamilton había llegado a su racha más larga de carreras sin victoria, pero Mercedes ya había avisado que estarían ahí para recoger cualquier fallo de los de arriba y transformarlo en victoria. La racha fue cortada en seco en Spa-Francorchamps. Una maniobra en la primera vuelta con Fernando Alonso le hizo volar, dañando su Mercedes y desatando la ira del piloto español.

Zandvoort. La que pudo ser la primera victoria de la temporada para Mercedes, pues al igual que ocurriera en Montmeló o en otros momentos puntuales de la temporada, mostraron un gran ritmo. La carrera apuntaba a un mano a mano con Max Verstappen en las últimas vueltas, pero un coche de seguridad inoportuno condenó al cuarto lugar. Quinto lugar para Lewis en Monza y carrera complicada en Singapur, donde no se pudo mejorar el noveno puesto. Tampoco fue excelsa en el aguacero de Japón, cruzando meta quinto.

Tras esto, se pudo ver la mejor versión de Mercedes de toda la temporada, completando Lewis una racha de tres segundos puestos consecutivos, donde quizás pudo ganar en Austin, más complicado en México, y sobre todo en Brasil, donde solo un toque que parecía evitable con Max Verstappen le hizo perder el tiempo suficiente para dejar la victoria en manos de su compañero de equipo, siendo esta la primera de mercedes en la temporada. El año se cerró en Abu Dhabi, donde Hamilton, luchando con Sainz, presumiblemente dañó su vehículo saltando con las bananas y forzando el abandono a unas pocas vueltas de la bandera a cuadros.

2022 acabó siendo la peor temporada de Lewis Hamilton en Fórmula 1 en lo que a datos se refiere, siendo sexto de la general, sin lograr ninguna victoria y superado por un compañero de equipo que acababa de aterrizar en Mercedes, y sin embargo, rozó el triunfo en al menos un par de ocasiones.

2021 (Mercedes; 2º, 387,5 puntos)

Tras un 2020 que se podría definir como un paseo triunfal para Hamilton y con una normativa que había congelado los chasis y prácticamente todo el desarrollo de los vehículos, Hamilton partía como gran favorito para lograr el ansiado octavo título mundial, convirtiéndose en el piloto más laureado de todos los tiempos. Sin embargo, una ligera reducción de la superficie del fondo plano ideada para mitigar la presión sobre unos Pirelli ideados para hace unas temporadas, provocó que Mercedes perdiera cierta competitividad antes una Red Bull al alza con un Max Verstappen que tenía poco que perder.

Y eso que la temporada no empezó mal para Lewis, con tres victorias y un segundo puesto en las cuatro primeras citas. La racha se torció en Mónaco donde erraron la configuración y la estrategia, cruzando meta séptimo. Tampoco fueron competitivos en Bakú, donde Verstappen se retiró tras un accidente por un reventón. Sin embargo, fue un error de Hamilton en la resalida, yéndose largo, lo que condenó lo que era una victoria o segundo puesto a una cita sin puntos.

Antes de verano, Verstappen encandenó tres victorias a las que Hamilton no pudo contestar, llegando la gran polémica del año en Reino Unido, cuando un contacto con Verstappen envió al neerlandés al muro mientras él ganaba la carrera. Más leña al fuego se echó en Hungría, cuando no fue Lewis sino su compañero quién provocó un accidente masivo en la salida que dejó maltrecho el Red Bull de Max que solo pudo ser noveno por la segunda posición de Hamilton.

Verstappen se llevó el triunfo en el no Gran Premio de Bélgica y en casa, en Zandvoort, con el británico sumando podios. De nuevo la polémica surgió en Monza, cuando ambos pilotos quedaron fuera de carrera tras tocarse en la chicane. Hamilton ganó en Rusia, cita donde el Red Bull iba a sancionar por la destrucción del motor de Silverstone, pero donde Max pudo ser segundo.

Red Bull no bajó la marcha en Estados Unido y México, seguido de cerca por Hamilton. Mercedes no dejó de trabajar y en la recta final del año encontró competitividad extra en su unidad de potencia, arrasando tanto en Brasil como en Qatar. También se llevó el triunfo Hamilton en Arabia Saudí, en una nueva cita con polémica por un contacto entre ambos pilotos cuando Verstappen levantó el pie para dejarle pasar tras un uso excesivo de las escapatorias.

Ambos pilotos llegaban empatados a puntos a la última cita del año, en Yas Marina. Quién quedase por delante, se llevaría el título de campeón del mundo. El ambiente estuvo altamente turbulento por las sospechas de que Verstappen podría provocar un choque con Hamilton, ya que salía beneficiado de un doble abandono.

La carrera comenzó y siguiendo la tendencia de las últimas carreras, Mercedes era ostensiblemente más rápido que el Red Bull. Durante casi todas las vueltas, Lewis Hamilton fue campeón virtual de la temporada 2021, pero un accidente en las últimas vueltas de Nicholas Latifi provocó la salida del coche de seguridad. Max Verstappen cambió neumáticos mientras que Hamilton decidió quedarse en pista para no perder la primera posición ante la posibilidad de que la carrera no se relanzase.

El director de carrera aceleró los pasos y la carrera terminó con una última vuelta bajo bandera verde que permitió a Verstappen adelantar a Hamilton para llevarse el título en uno de los finales más frenéticos que se recuerdan. Lewis Hamilton finalizaba como subcampeón por tercera vez en su carrera deportiva, tras 2016 y 2007, los controvertidos campeonatos contra Rosberg y Fernando Alonso, Kimi Raikkonen mediante.

2020 (Mercedes; Campeón, 347 puntos)

Temporada 2020, la del coronavirus. La de las carreras dobles, los continuos controles sanitarios y sin un solo aficionado en las gradas. ¿Resultado? Otro título más para Lewis Hamilton, el séptimo, con el que lograba igualar los títulos de Michael Schumacher y compartir ese espacio de piloto más laureado de todos los tiempos.

Para no perder la tradición, Lewis tuvo una carrera inaugural sin victoria, pero con cinco triunfos en seis carreras pronto dejó patente que este título tenía un solo dueño, pues no solo no encontró oposición en los equipos rivales, sino que su compañero de equipo tampoco estuvo a la altura.

Triunfó allá donde fue, a veces de manera guionizada, cruzando la línea de meta con un neumático pinchazo, como en Silverstone, o subiendo a lo más alto del podio en los lugares que la Fórmula 1 visitaba por primera vez, como Mugello o Portimao, o a los que regresaba después de mucho tiempo, como Imola, Turquía, e incluso Nurburgring.

Once victorias en una temporada de diecisiete carreras a los que hay que sumar tres podios. Una manera tremendamente efectiva de engordar las ya de por sí abultadas estadísticas del piloto británico. Lewis Hamilton solo faltó al podio en la carrera inaugural en Austria, en el circuito de Monza por una sanción, y en Sakir, donde no pudo competir tras tener que aislarse al contraer coronavirus.

Tal fue el dominio del británico que gran parte de la atención se centró en la renovación o no del piloto de Mercedes. Pero Hamilton, centrado en su papel de activista apoyando desde la Fórmula 1 las premisas del movimiento Black Lives Matter, no quería ni oír hablar del tema, hasta el punto de que el contrato con Mercedes llegó a su fin y dejó de ser piloto de Fórmula 1. Aunque no por mucho tiempo, pues antes del comienzo de la temporada 2021, ambas partes ratificaron su continuidad, eso sí, por solo un año. El objetivo; superar a Michael Schumacher, y después… quién sabe.

2019 (Mercedes; Campeón, 413 puntos)

Por cuarta vez en cuatro años, Lewis Hamilton inició la temporada con un segundo puesto en la carrera inaugural de Australia, por detrás de su compañero de equipo. Sin embargo, a diferencia de años anteriores, Hamilton logró unos números de récord, superando incluso sus mejores registros desde que llegó a Mercedes, cerrando las ocho primeras carreras del año con seis triunfos y dos segundos puestos.

La falta de consistencia de Ferrari y el menor rendimiento de Red Bull conllevó no solo que Lewis se afianzase en la primera posición, sino que su única amenaza fuese su compañero de equipo, que nunca llegó a ser una amenaza real.

Solo tras el parón veraniego se pudo ver a un rival verdaderamente competitivo, Ferrari, pero para entonces, la ventaja del británico le permitió vivir la que posiblemente haya sido su temporada más plácida y campeonato más sencillo, pues ni con Nico Rosberg a su lado logró tanto domino.

Hamilton cerró la temporada con once victorias y diecisiete podios, finalizando todas las carreras y además en los puntos, repitiendo el hito de 2017. Lewis conseguía su sexto campeonato del mundo y ve más cerca lo que parecía ciencia ficción: igualar los números de Michael Schumacher.

2018 (Mercedes; Campeón, 408 puntos)

La temporada 2018 no tuvo un comienzo plácido para Lewis Hamilton, que partiendo como favorito, por lo visto tanto en temporadas anteriores como en los test de pretemporada, no consiguió superar a Sebastian Vettel en las primeras carreras de la temporada, bien por ritmo, bien por acierto estratégico de los rivales.

El británico tuvo que esperar hasta la cuarta cita de la temporada, en Bakú, para conseguir el primer triunfo, y aun así, seguía sin encarrilar el dominio que le había caracterizado en temporadas anteriores, y que gracias a un abandono en Austria, y a una dolorosa derrota en casa frente a Ferrari, llegó a temer que el título se le escapaba, pues en el ecuador de la temporada, Vettel era líder del mundial.

Pero precisamente, cuando peor pintaba todo, Hamilton marcó su punto de inflexión, comenzando una racha triunfal de seis triunfos y un segundo puesto en la siete siguientes carreras, lo que unido a las malas carreras de su máximo rival, volvieron a encauzar el título para Lewis en una temporada en l que sufrieron más de lo esperado.

A pesar del abrupto comienzo, Lewis acabó sumando once triunfos, faltando en solo cuatro ocasiones a su cita con el podio, lo que le hizo acabar el año con 408 puntos, la cantidad más alta desde que está en F1. Hamilton igualaba con cinco títulos a Juan Manuel Fangio y solo tiene por delante los siete títulos de Michael Schumacher.

2017 (Mercedes; Campeón, 363 puntos)

Con la inesperada retirada de Nico Rosberg de la Fórmula 1, Hamilton volvía a ser el máximo favorito al título de campeón si no lo era ya, con la salvaguardia de que su compañero de equipo en esta ocasión no debía ser rival para él.

Sin embargo, Hamilton se daría cuenta rápidamente de que no sería un camino de rosas para él. Ferrari plantó cara a Mercedes, especialmente en manos de un inspirado Vettel, que encontró un mejor trato con los neumáticos como especial aliado. Hamilton logró ganar en China, pero no en Australia, Bahrein o Rusia, lo que provocó que pese a ganar en el Gran Premio de España, Vettel mandaba en la clasificación general.

La situación se volvió incluso crítica en Mónaco, donde Vettel consiguió la victoria y Hamilton no pudo superar la séptima posición, y donde por primera vez se empezó a especular que Ferrari se podía llevar este título. Hamilton sacó todo su potencial en Canadá, primera carrera en la que Vettel quedaba apeado del título. Pero a una de cal, una de arena, y la victoria en Norteamérica le siguió el Gran Premio de Azerbaiyán, en el que con la victoria en bandeja, a Hamilton se le desprendió la espuma protectora del cockpit, teniendo que hacer una parada fuera de guion y cediendo puntos con Vettel.

También cedió puntos en Austria, donde tras cambiar la caja de cambios, en carrera solo pudo remontar hasta la cuarta posición. Hamilton revertió la situación en uno de sus lugares preferidos, en Silverstone, donde consiguió la victoria por un séptimo puesto de Vettel, aunque el alemán le devolvió la jugada en Hungría, donde ganó y Hamilton solo pudo ser cuarto.

Pasado el ecuador de la temporada, Vettel y Ferrari mantenían sus opciones, sin embargo, Hamilton encadenó una racha de resultados positivos con victorias en Bélgica, Italia, Singapur, Japón y Estados Unidos, alternado con un segundo puesto en Malasia, lo que unido a una gira asiática para olvidar por parte de Ferrari, dejó el título en bandeja para Lewis.

El británico así confirmaba su cuarta corona en la prueba de México, tras una accidentada primera vuelta en la que tuvo un contacto con el propio Vettel, que quizás se podría haber evitado por parte del alemán. Con daños en su vehículo, Hamilton acabó noveno la carrera, suficiente para celebrar el título. La temporada acababa para Hamilton con un cuarto y un segundo lugar, sumando un total de 363 puntos y nueve victorias.

2016 (Mercedes; 2º, 380 puntos)

Tras dos títulos consecutivos, Lewis Hamilton partía en la temporada 2016 como máximo favorito al título, ya que su máximo rival continuaba siendo su compañero de equipo Nico Rosberg y porque nada hacía presagiar que Ferarri o Red Bull pudieran hacer frente a la unidad de potencia Mercedes.

Sin embargo, las cosas no comenzaron como Hamilton hubiera deseado. Si bien siguió clasificando tan bien como siempre, Lewis encontró en las salidas su talón de Aquiles, lo que luchando contra un piloto tan completo como Nico Rosberg le hizo no poder ganar en ninguna de las cuatro primeras carreras del año, como sí hizo su máximo rival.

Con la llegada a Europa, Hamilton trataba de recortar su desventaja, pero el Gran Premio de España finalizó en la primera vuelta cuando los dos Mercedes se tocaron en una imagen bochornosa para la marca. Hamilton entendió que ya no valía lo de ser agresivo, pues Rosberg tenía ventaja y ya no le importaba tener un toque y quedar fuera de carrera.

La suerte sí sonrió a Hamilton en Mónaco, donde esta vez fue Rosberg el que sufrió, y a la primera victoria del año de Hamilton le siguió un séptimo puesto de Nico, con problemas para calentar los neumáticos. Hamilton parecía iniciar lo que sería una racha triunfal de victorias, sin embargo, a la llegada al trazado de Bakú, Hamilton cometió un doble error en clasificación que le hacía salir en décima posición a carrera tras golpear las protecciones. La carrera se la llevaba Rosberg mientras que Hamilton se tenía que conformar con el quinto lugar.

Ahora sí, Hamilton ganaba sin oposición en Austria, Gran Bretaña, Hungría y Alemania. Cuando la remontada de Hamilton parecía estar de cara, Rosberg sorprendió con un trío de victorias consecutivas en Bélgica, Italia y Singapur. Dicho acontecimiento y el hecho de que Hamilton comenzaba a ver por primera vez de verdad que el campeonato se le podía escapar, comenzaron a surgir comentarios sobre cambios de mecánicos dentro de Mercedes, una serie de personal que se había intercambiado entre Rosberg y Hamilton y que parece ser que penalizaba al británico.

En Malasia, Hamilton se puso el mono de trabajo y rodaba rumbo a la victoria cuando ocurrió lo inimaginable, un motor Mercedes rompió, dejando a Lewis sin triunfo y con el campeonato más cuesta arriba que nunca, pues Rosberg aprovechó la ocasión para finalizar tercero.

Y por si fuera poco, al final de la gira asiática, Rosberg conseguía una inesperada pole position en Suzuka con tan solo 13 milésimas de margen, y en carrera, Hamilton tiene la peor salida del año, que le hace perder muchas posiciones. El británico lo intentó todo para remontar pero se encontró con un muy correoso Max Verstappen al final de carrera, por lo que se tuvo que conformar con la tercera posición.

Ahora sí. Hamilton no iba a perdonar y acabó el año con cuatro victorias seguidas, pero Rosberg ya había conseguido la ventaja suficiente para acabar todas las carreras en segunda posición y llevarse el título de campeón, como así ocurrió. Nico Rosberg, el que era único rival de Hamilton, se llevaba el título por solo cinco puntos de diferencia.

Hamilton acababa con 10 victorias de 21 posibles, así como 12 pole position, lo que no ayudaba a tapar el sabor amargo de que se le escapara un título que tenía tan fácil de ganar.

2015 (Mercedes; Campeón, 381 puntos)

Después de que Lewis Hamilton se hiciese con su segundo título de campeón del mundo en 2014, el británico era de nuevo el gran rival a batir en la nueva temporada. La máquina que había creado Mercedes para el curso 2015 era una vez más, prácticamente perfecta, y así lo demostraron durante la pretemporada, en la que dieron más vueltas que nadie y tan solo utilizaron una unidad de potencia.

En Australia llegó la primera victoria de las diez que lograría este año y que le otorgarían su tercera corona para ponerse a la altura de Ayrton Senna, Jackie Stewart, Niki Lauda, Nelson Piquet y Jack Brabham en este apartado.

En Malasia se vería sorprendido por Sebastian Vettel y Ferrari, que con su estrategia de paradas y buen cuidado de las gomas lograron ganarle la batalla a Lewis Hamilton en la parte final de la prueba, para que el alemán lograse su primera victoria de rojo y la primera desde el Gran Premio de Brasil de 2013, con el británico en el segundo escalón del podio.

Tras esta prueba en Sepang, llegarían dos victorias en China y Bahréin, con la primera polémica del año dentro del equipo Mercedes en Shanghái, prueba en la que Hamilton redujo su ritmo en pista de manera considerable cuando rodaba en cabeza, ya que intentaba así que se acercasen los Ferrari a la zaga del W06 de Nico Rosberg, para que tuviese que lidiar con ellos, algo que no gustó al alemán y que dejó claro en los momentos posteriores al final de la carrera.

No saborearía las mieles de la victoria ni en España, cita en la que ganó por primera vez en el año su compañero de equipo, Nico Rosberg, ni en Mónaco, carrera en la que un pitstop fallido en la parte final le dejó en bandeja el segundo triunfo consecutivo al alemán, con el británico en tercera plaza.

Fue justo antes de llegar a Mónaco cuando llegó uno de los momentos más importantes del año para Hamilton, pues se anunció su renovación con el equipo Mercedes hasta el año 2018, tras algunas semanas de incertidumbre en las que las conversaciones no terminaban de llegar a buen puerto.

Aunque no pudo celebrar la extensión de contrato con victoria en las calles de Montecarlo, el británico volvió a lo más alto del podio en Canadá, en la que era ya su cuarta victoria de la temporada en el que es el trazado del calendario, ya que es en el que más veces ha subido al primer cajón (cuatro).

Con un segundo puesto en Austria y aún sin victorias en la gira europea, Hamilton llegó a su carrera de casa con muchas ganas de brillar ante su público y así fue, repitió el triunfo de 2014 con un dominio en la carrera de principio a fin.

Una desafortunada prueba en Hungría, en la que finalizó en sexta posición y que, a la postre, sería su peor resultado del año, excluyendo el abandono de Singapur, cortó su racha de podios consecutivos dejándola en 16 y como la segunda más larga de la historia de la Fórmula 1.

Con Rosberg aún medianamente cerca, Hamilton apretó los dientes con dos victorias más en Spa y Monza y aumentó su renta en el Campeonato después de que Rosberg abandonase en la prueba italiana con un problema de motor, pues ya sufrió con la nueva especificación en los entrenamientos y la tuvo que cambiar a una con mucho kilometraje para la carrera y que no aguantó hasta el final.

En Singapur sería Hamilton el que sufriría su primer y único abandono del año, con otro problema de motor en la que fue la carrera más complicada para Mercedes del año, al no adaptarse bien el W06 al asfalto de Marina Bay y al comportamiento del neumático superblando allí.

Sin embargo, consciente de que ganar el título estaba en su mano, aunque Sebastian Vettel aprovechaba para recortar distancias con su tercera victoria del año en Singapur, Hamilton encadenó tres victorias seguidas en Japón, Rusia y Estados Unidos, la última fue la que le dio matemáticamente el Campeonato, a falta de tres carreras para el final de la temporada.

Algo más relajado pero aún con hambre de ganar, el británico vio como Rosberg le arrebató las últimas seis Poles de la temporada y venció en las tres carreras que restaban del calendario (México, Brasil y Abu Dhabi) ,aunque siempre con su compañero británico a la zaga, completando así Hamilton un año prácticamente perfecto, con 17 podios de 19 posibles y, de ellos, diez fueron victorias.

Hamilton ha destacado que, tras los problemas en Singapur, se realizaron cambios en el ajuste del monoplaza que no le fueron tan bien a su conducción como a la de Nico y que, pese a lograr tres victorias tras esas alteraciones, el británico ha confesado que ya no ha vuelto a estar cómodo al volante del W06. Así, ha visto como Rosberg terminaba el año con ventaja sobre él, por lo que avisa que trabajará durante el invierno para recuperar lo perdido en el final de campaña y arrancar en Australia de nuevo con una nueva victoria en 2016.

2014 (Mercedes; Campeón, 384 puntos)

El segundo año de Lewis Hamilton en Mercedes y ya tiene ese ansiado bicampeonato, que se ha hecho esperar seis largos años. Ahora lo puede colocar en la vitrina de su casa, en el lujoso Principado de Mónaco, y destacarlo frente a todos los demás porque ésta es, sin duda, su victoria “más dulce”, por todo lo que ha tenido que atravesar esta temporada.

Tras abandonar McLaren a finales de 2012, hastiado de no tener entre manos un monoplaza realmente competitivo y sí mecánicas irregulares, que le privaron de estar en posición de luchar por el Campeonato con garantías desde 2008, emprendió rumbo en dirección a Brackley, a la marca alemana de las tres puntas. Un cambio de aires, que al principio no entendieron muchos, pero que se ha demostrado como todo un acierto, dado el abrumador dominio este año del imponente W05.

No comenzó bien el 2014 para Lewis Hamilton. Un problema mecánico le obligó a retirarse el domingo en la cita inaugural de Albert Park, empañando la Pole Position conseguida el día anterior. Esto no supuso sólo el primer cero en su casillero sino que, de esta manera, el británico dejaba también en bandeja la victoria a su compañero de equipo, Nico Rosberg, que sería, durante toda la temporada, su único rival en la disputa por el título.

Después, el británico enlazaría cuatro triunfos consecutivos en Malasia, Bahrein, China y España y una segunda posición en el Gran Premio de Mónaco, una cita, esta última, que supuso el inicio de una tormentosa relación entre los dos pilotos de Mercedes y que tendría su punto más agrio en Spa, con ese toque en Les Combes, que hizo a Hamilton abandonar la prueba cuando marchaba primero.

Declaraciones altisonantes y acusaciones públicas entre los pilotos enrarecieron el ambiente dentro del seno del equipo y obligaron a los responsables máximos de Mercedes a tomar cartas en el asunto. Se les dejaría luchar a en pista pero con responsabilidad y advirtiendo a los pilotos que de ninguna manera se toleraría otro suceso como el acaecido en Spa.

Después del GP de Bélgica, Hamilton encarriló el título con otra racha de cinco triunfos seguidos en Monza, Singapur, Suzuka, Rusia y Estados Unidos que dejaron muy tocado psicológicamente a Nico Rosberg y aumentaron los récords del imparable británico.

El adelantamiento de Lewis a Nico en Suzuka fue un aviso de que el campeón de 2008 iba a por todas en esta recta final del Campeonato y de que la presión cada vez podía más con un Rosberg, que la había aguantado demasiado bien hasta entonces, dejando entrever sólo pequeñas señales de nerviosismo en Estados Unidos y en el definitivo Gran Premio de Abu Dhabi, en el que la fiabilidad del W05 de Hamilton superó a la del coche del alemán y acabó decidiendo una victoria que, en esa ocasión, valía doble.

Con la superioridad con la que han acabado el año Mercedes, alzados como Campeones de Constructores indiscutibles ya en Rusia, su posición de dominio parece que se mantendrá también en 2015, al menos así lo auguran los demás equipos.

Por su parte, Hamilton permanecerá un año más con la escudería que le ha visto resurgir de sus cenizas, en una temporada en la que las batallas con Rosberg prometen volver a ser el plato fuerte. Parece que los 67 puntos de diferencia que proclamaron a Lewis campeón no son suficientes para agilizar las negociaciones que harán al ex de McLaren quedarse también en 2016 con los de Brackley. Sin embargo, Nico no necesitó ganar este Mundial para firmar, a mitad de temporada, con el mismo equipo un contrato multi-anual. Permanezca o no este agresivo deportista con su presente escudería, nadie le quita de la cabeza su sueño de emular al gran Ayrton Senna y lograr el tricampeonato. El próximo título de pilotos puede ser suyo también.

2013 (McLaren; 4º, 189 puntos)

Lewis Hamilton aterrizó en Mercedes como si de su primer año en Fórmula 1 se tratase. Cuidando los detalles y trabajando muy cerca del equipo, consciente de que no tendría una temporada sencilla. Sin embargo, aunque su rendimiento quizás ha dejado un sabor agridulce por tratarse de uno de los mejores pilotos de la parrilla, el británico se ha adaptado muy bien a las 'flechas plateadas'.

El campeón de 2008 decidió abandonar el equipo de toda su vida, McLaren, después de tres años irregulares en los que el equipo no le había dado un monoplaza ganador como en 2007 y 2008. Así, cansado de esperar para volver a triunfar, decidió embarcarse en el proyecto de Mercedes que, a priori, entra ahora en sus mejores tiempos.

Tanto es así que después de terminar sucampeones en la clasificación de constructores, los objetivos han superado por mucho las expectativas que se tenúan a principios de temporada. Culpa de ello la ha tenido un Hamilton prácticamente infalible, que ha dado guerra en calificación con cinco poles y que, pese a sólo lograr una victoria (Hungría), ha finalizado cuarto en el campeonato merced a sus 17 carreras dentro de los puntos.

Es cierto que se ha echado en falta algo de su agresividad habitual en ciertas ocasiones pero el británico, mucho más maduro en esta nueva etapa, es consciente de que con un coche rápido no necesita más que ser constante para estar en la lucha como han demostrado en otras ocasiones rivales como Vettel o Alonso, 'seguros de vida' para sus equipos.

Hamilton logró en 2013 cumplir uno de sus objetivos primordiales: demostrar a todo el mundo que podía ser bueno fuera de McLaren y que no se equivocaba al abandonar la formación de Woking. Ahora, con ese asunto resuelto, el británico afrontará 2014 con la confianza y las ganas para volver a estar en la pomada por el título.

2012 (McLaren; 4º, 190 puntos)

La temporada 2012 de Lewis Hamilton arrancaba con el todavía sabor amargo de un 2011 tormentoso pero con el gusto de conseguir las dos primeras Pole Position del año. Aunque el británico no pudo mantener la primera posición en carrera, sus tres podios consecutivos le animaban a buscar su primera victoria del año aunque tuvo que esperar a la séptima prueba, en Canadá, para subir a lo más alto del podio.

Siempre y cuando su MP4-27 no sufría problemas de fiabilidad y se veía obligado a retirarse de la carrera, Hamilton pilotaba con maestría y mostraba una competitividad que le señalaba como uno de los aspirantes a la victoria en cada Gran Premio y a ser un candidato más a la lucha por el Mundial. Incluso Fernando Alonso reconoció, cuando lideraba el Mundial, que su máxima preocupación era el piloto británico ya que era éste quién tenía una actitud fuerte en pista.

Cuarto clasificado en la Clasificación general de Pilotos, el de McLaren logró cuatro victorias en 2012, una menos que el tricampeón Sebastian Vettel, pero los cinco abandonos a lo largo del año lastraron sus opciones de conseguir su segundo Título Mundial. Fuera de la pista, la vida de Hamilton giraba a más revoluciones que su MP4-27. Las constantes informaciones sobre su salida de McLaren, el equipo con el que debutó en la F1 en 2007, y su llegada a Mercedes se repetían carrera tras carrera hasta que el 28 de septiembre se confirmó el ‘vox populi’ del momento: el británico pilotaría para la escudería de Brackley a partir de 2013 y reemplazaría a Michael Schumacher.

La decisión no agradó a la formación de Woking y sus miembros todavía se preguntan por qué el británico abandona la escuadra que ha sido siempre su casa. A los responsables de McLaren y a su compañero de equipo, Jenson Button, tampocó gustó la actividad del campeón de 2008 en las redes sociales, especialmente en su perfil de Twitter. La publicación de una comparativa de la telemetría de los dos monoplazas, declaraciones en las que mostraba su enfado por montar el alerón trasero ‘antiguo’ en comparación con el nuevo que sí llevaba Button en el Gran Premio de Bélgica y demás indiscreciones provocaron asperezas que entreveían la salida de Hamilton de la formación.

A pesar de los altibajos fuera del monoplaza, el británico quería despedirse de su familia de Woking subiendo a lo más alto del podio y dejando a McLaren como equipo subcampeón del Mundial de Constructores. En la penúltima prueba, el inaugural Gran Premio de Estados Unidos en el Circuito de las Américas, logró una victoria ‘de coraje’ después de partir segundo y adelantar a Sebastian Vettel. Una semana más tarde, un incidente con Nico Hulkenberg cuando lideraba la carrera le privó de subir por última vez a lo más alto del podio vestido con los colores de McLaren. No ganó en el último GP y McLaren se quedó sin el subcampeonato

2011 (McLaren; 5º, 227 puntos)

Mundial de luces y sombras para el piloto inglés, que sigue sin encontrar el rumbo después de alzar su hasta ahora único título mundial. El 2011 mezcló un torbellino de problemas personales con grandes demostraciones de talento en la pista y puntuales incidentes con algunos rivales concretos. Un primer vistazo a la estadística de final de campaña del inglés muestra su clave de este mundial: la irregularidad. Quinto clasificado con 227 puntos, Hamilton sufrió constantes altibajos y se vio, por primera vez, superado por un compañero de equipo al final de un mundial.

Lewis arrancó el año con fuerza y se erigió en el primer abanderado anti-Red Bull con su triunfo en China, que detenía por un momento el rodillo triunfal de los monoplazas energéticos. Sin embargo, las ilusiones empezaron a desvanecerse a partir de la carrera de Mónaco, donde el londinense empezó a evidenciar la cara oscura de su temperamento. El primero en sufrir las consecuencias fue Felipe Massa, a quien rompió la dirección tras intentar practicar un adelantamiento suicida en la curva del Grand Hotel (la antigua Loews). Unas vueltas más tarde, otro absurdo ataque en Santa Devota envió a Pastor Maldonado al muro, privando al venezolano de sumar sus primeros puntos en la Fórmula 1. En la siguiente cita, celebrada en Canadá, la víctima fue su propio compañero, Jenson Button, con el que protagonizó una estúpida colisión en la recta de meta que le dejó a cero por primera vez en todo el año. Con el mundial cada vez más lejos y viéndose superado por Button, Lewis perdió los nervios... y su "objeto desestresante" no fue otro que el F150º de Massa.

La relación entre ambos acabó rompiéndose del todo tras numerosos conatoctos en el asfalto. Al mencionado de Mónaco siguió uno más en la última vuelta de Silverstone. Hamilton, muy a su estilo, se jugó el adelantamiento a una maniobra de todo o nada en la curva a derechas que da acceso a la nueva recta de meta. El británico se salió con la suya, pero no se libró de la reprimenda de su rival, que acabó trazando el viraje por la escapatoria. Su siguiente cita llegó bajo las estrellas de la noche de Singapur, y se saldó con un alerón roto para el de McLaren y un pinchazo en el Ferrari. Con ambos encendidamente enfrentados, Massa se tomó la revancha en el nuevo circuito de India en un nuevo incidente que acabó con ambos fuera del asfalto, toque que alteró al mismísimo Rowan Atkinson, Mr Bean, que seguía la carrera desde el box del equipo plateado. Tan peculiar "crisis de pareja" hizo saltar chispas en la televisión, y acabó con un apretón de manos en Abu Dhabi y la intención por ambas partes de olvidarlo todo.

Más allá de estos detalles, Hamilton empató a tres triunfos con su compañero (China, Alemania y Abu Dhabi), dejó a Red Bull en Yeongam, Corea, sin el récord histórico del pleno de poles en una temporada, y fue el segundo piloto que más vueltas lideró en toda la campaña.

2010 (McLaren; 4º, 240 puntos)

Lewis tuvo arrancó la temporada con discreción. De hecho, el británico debió esperar siete carreras para lograr el primero de los tres triunfos con que cerraría la temporada. A mitad de campaña cosechó una serie de buenos resultados que le lanzaron al liderato del mundial, pero su racha se vio truncada en la recta final tras encadenar tres abandonos en cuatro pruebas, dificultándole mucho las posibilidades de reeditar el título de 2008 campeón. Al final, debió conformarse el cuarto puesto en la clasificación del mundial.

2009 (McLaren; 5º, 49 puntos)

El piloto Británico sufrió en sus propias carnes la impotencia de no disfrutar de un coche competitivo por primera vez en su carrera. La temporada 2009 podía ser la de la continuidad de un gran campeón, que al término de su anterior campaña soñaba con emular las cifras de títulos de Ayrton Senna y Michael Schumacher, pero el MP4/24 demostró a principio de temporada ser un coche lento e irregular. El esfuerzo por evolucionar el MP4/23 hasta la recta final de la temporada anterior condicionó gravemente el diseño del prototipo de 2009, lo que llevó al inglés a conformarse con pelear por los últimos puntos en las primeras carreras.

La regeneración del MP4/24 se produjo en el Gran Premio de Hungría, donde Hamilton se hizo con la victoria, demostrando un gran ritmo en carrera. De ahí hasta final de temporada, el comportamiento de su monoplaza dio un cambio radical y eso hizo que el londinense volviera a luchar por las victorias. En el Gran Premio siguiente, celebrado en Valencia, su McLaren fue inalcanzable en entrenamientos, en los que señaló la pole, y solo un fallo en boxes le privó de una victoria segura. Aunque privado de la batalla por el mundial, Hamilton actuó de árbitro en la disputa entre Button, Barrichello y Vettel, robando valiosos puntos a todos ellos.

El punto negativo de la temporada se produjo en la carrera de Italia, en el circuito de Monza. En la última vuelta, después de una gran remontada, Hamilton se llegó a situar a pocos segundos de Button, y en su frenética lucha por alcanzarle cometió un fallo y se estrelló cuando tenía la tercera posición asegurada. Al final del mundial, Lewis debió conformarse con una lejana quinta plaza, con tan sólo 49 puntos.

2008 (McLaren; campeón, 98 puntos)

Decidido a conseguir el Campeonato del Mundo tras la decepción del año anterior, Hamilton consiguió al fin quitarse esa espina. Y no sólo lo logró, sino que batió un récord hasta el momento estaba en manos de Fernando Alonso, el del detentor del título con menor edad de la historia.

La temporada fue, en general, bastante bien para el inglés. Sin embargo, en su camino hacia el título se entrometió el brasileño Felipe Massa, que le lo desafió en varias carreras hasta el punto de disputarle el título hasta la última vuelta del GP de Brasil..

Hamilton arrancó 2008 ganando en Australia. Sin embargo, la temporada estaría lejos de ser un paseo militar para el británico, pues los Ferrari evidenciaron pronto unas grandes prestaciones. A la mejora de los bólidos rojos, Además, el inglés cometió algún que otro polémico error: en el GP de Canadá se llevó por delante a Kimi Räikkönen, que aguardaba ante el semáforo rojo a la salida del pit lane. La FIA le penalizó con 10 posiciones para la siguiente carrera. Luego en Francia debió salir en la posición 13 y, durante la carrera, fue castigado una vez más por saltarse una chicane en la vuelta 13 al adelantar a Vettel. "Pueden seguir penalizándome, pero yo voy a seguir batallando", manifestó el piloto al término de la prueba.

Y dicho y hecho. Su mejor momento deportivo lo disfrutó en el GP de Gran Bretaña, la carrera de casa, que se disputó bajo un intenso aguacero. Hamilton protagonizó entonces una victoria memorable que dejó a todos los rivales 'tirados en la cuneta' a un minuto y 6 segundos, doblando a casi todos menos a sus acompañantes del podio. Un recital de maestría, velocidad, neumáticos, técnica, táctica, salida..."Es la mejor victoria que he conseguido jamás", declaró en la rueda de prensa de la FIA. Su racha continuó en Alemania, pero en el GP de Europa, Massa se consolidó como único rival para el título.

En Bélgica fue penalizado una vez más. La FIA le arrebató en esta ocasión la victoria en la carrera por un adelantamiento a Räikkönen saltándose una chicane."Kimi me echó fuera", aseguró el piloto. Las maniobras al límite continuaron en Japón, donde volvió a ser penalizado con un Drive Through por un incidente con el finlandés como protagonista. A falta de dos carreras, Lewis lideraba el camnpeonato con una ventaja de apenas 5 puntos con respecto a Massa. Así las cosas, el inglés ganó en China y dejó para Brasil la consecución del título.

Pero el ansiado título no acabó de consolidarse hasta el último suspiro. Bajo la lluvia y con doblados por delante, Lewis rodaba sexto mientras Massa dominaba la carrera a falta de dos vueltas. Esta situación entregaba el cetro al brasileño. Sin embargo, en una jugada que aún cuesta analizar y digerir, el inglés logró auparse hasta la quinta posición en los últimos metros de la carrera y, por tanto, cambiar de signo el campeonato. Mientras en Ferrari festejaban el título, Lewis remataba la faena para el asombro de todos. "Ha sido la carrera más dramática de mi vida", comentaría poco después el nuevo campeón, que quedó a tan solo un punto de distancia (98) de su contrincante. De infarto.

2007 (McLaren; 2º, 109 puntos)

Lewis Hamilton debutó en Fórmula 1 como compañero del español Fernando Alonso, con el que protagonizó algunos rifirrafes a lo largo del año. Su debut en la categoría fue más que notable, pues acabó segundo a tan sólo 2 puntos de Kimi Räikkönen y empatando con el asturiano al término del campeonato.

El año arrancó con una exitosa pero polémica andadura en Fórmula 1 para Lewis Hamilton. Encadenó nueve podios en las nueve primeras carreras, con dos victorias incluidas en Canadá y Estados Unidos. Poco después empezaron los encontronazos con Alonso. Uno de las más importantes se produjo en los entrenamientos oficiales del GP de Hungría. Hamilton arrebató la pole tras la penalización de cinco posiciones que la FIA impuso al español, hecha pública pasadas las 22 horas de la jornada de entrenamientos. ¿El motivo? Fernando demoró su salida a pista desde los boxes mientras Hamilton esperaba parado, tras él, su turno, lo que provocó que el inglés no llegara a tiempo para señalar su vuelta rápida.

Con todo, esta suerte de guerra subterránea arrancó en el GP de Mónaco. Las especiales condiciones del trazado urbano fueron el telón de fondo para una serie de decisiones que el equipo McLaren tomó durante la carrera en lo que refiere a paradas en boxes y mantenimiento de los monoplazas, dando una serie de instrucciones que molestaron al piloto inglés, que se mostró públicamente enfadado y "sorprendido". Hasta la propia FIA investigó si hubo favoritismo hacia Alonso, pero su conclusión exculpó al equipo.

La temporada se puso tensa hasta en la tabla clasificatoria. Tanto que, finalmente, la inexperiencia de Hamilton le jugó algunas malas pasadas. En el último GP, celebrado en Brasil, apretó el botón del limitador en plena recta, lo que le rezagó muchas posiciones y acabó privándole de un título mundial que muchos daban por asegurado hacia el ecuador del certamen. Le tocaría esperar un año más...

Palmarés previo a la F1

Lewis Hamilton arrancó su carrera deportiva en el karting inglés, disciplina a la que llegó gracias al esfuerzo de su padre, que financiaba su participación en sus inicios a copia de acumular horas extras como trabajador del metro de Londres. Con el paso de los años, Lewis fue puliendo su talento al volante hatsa alzar su primer título en la categoría Cadete del Super One British, competición desarrollada por varios clubs y asociaciones deportivas del país. Apenas contaba 10 añitos.

Al año siguiente venció la competición creada para formar a futuros talentos del karting, la McLaren Mercedes Champions of the Future series, además de alzar el título de Kart Masters organizado por la cadena Sky TV, el Five Nation Champion y el STP Championship de karting.

En 1997, Hamilton repitió título en la McLaren Mercedes Champions of the Future Series, imponiéndose también en la Super One British Series de categoría Junior . En la ceremonia de premiación de final de año se acercó a Ron Dennis para anunciarle que deseaba correr en McLaren. La determinación del pequeño piloto londinense llamó la atención de Dennis, que en adelante se convirtió en su gran padrino deportivo.

Incluido en el Programa de Formación de Jóvenes Pilotos de McLaren, Hamilton finalizó segundo en el campeonato de Futuros Campeones y cuarto en el Italian Open Championship, todo ello dentro de la división Júnior.

En 1999 compaginó la categoría ICA (Intercontinental A), venciendo el trofeo de la Industria, con Júnior, donde se proclamó subcampeón del Open Masters.

En su último año en karting, Hamilton dio el salto a la Fórmula A (llamada KF1 desde 2007), proclamándose campeón italiano absoluto con el equipo MBM, dominando todas las carreras y sumando la victoria en su división europea y en el Masters de Bercy.

Los buenos resultados obtenidos en el karting le abrieron las puertas de los monoplazas en 2001, año en que debutó en las Winter Series de la Fórmula Renault británica, que finalizó en quinto lugar en. Al año siguiente, con su número de la suerte, el 3, adherido a su coche, se hizo con el tercer puesto en la Fórmula Renault pilotando para el equipo Manor Mostorsport, totalizando 3 victorias, 3 Poles, 3 vueltas rápidas y 28 puntos. Además, Hamitlon ffinalizó ñla Eurocup en quinto lugar con un triunfo y dos presencias más en el podio, pese a disputar tan sólo cuatro carreras.

En 2003 se graduó en la Fórmula Renault proclamándose campeón británico con un impresionante currículo: 10 victorias, 11 poles y 9 vueltas rápidas para un total de 419 puntos..

Tras probar fugazmente la F-3 en dos rondas de la serie británica en 2003, al año siguiente, Hamilton dio el salto a la F-3 Euro Series, certamen donde fue quinto con 68 puntos, por detrás de Nico Rosberg. En el camino quedaron cinco podios y un triunfo en el espectacular circuito de Norisring. Además, ganó el primer Superprix de del Golfo Pérsico, remontando desde posiciones muy retrasadas.

El título llegó al año siguiente, donde la combinación Hamilton-ASM arrasó. El inglés alzó el entorchado a cuatro carreras del final del campeonato, sumando 161 puntos, equivalentes a unas impresionantes 15 victorias, 13 pole positions y 10 vueltas rápidas. En el camino llegaron también triunfos en el Masters de Zandvoort, en Mónaco y en Pau. Lewis no corrió, sin embargo en macao, prueba descartada por Ron Dennis por su dureza.

El triunfo en la F-3 Euro Series le abrió las puertas de la GP2, certamen que dominó con rotundidad en su año de debut. El británico, que pilotó para ART, ganó cinco carreras y sumó otros nueve podios para totalizar 114 puntos, relegando a Nelson Piquet Jr a la segunda plaza por 12 puntos. Durante la temporada fueron constantes las referencias a su probable salto a la F-1 con McLaren, que el inglés debería "jugarse" con el probador del equipo, Pedro Martínez de la Rosa. Sin embargo, este esperado cara a cara no tuvo lugar jamás, y Ron Dennis optó por la vía rápida, otorgándole el segundo volante.