El color con el que estaban pintadas las paredes de la habitación de tu niñez, esa piel que se parecía a la de un sofá en el que pasabas horas y horas o simplemente un diseño de llantas exclusivo es lo que necesitas para que tu Rolls-Royce sea único en el mundo. Quien tenga este bendito problema, sabrá que tiene a su disposición los servicios de la propia compañía, que permite a cada cliente hacer un coche exclusivo, lógicamente, previo pago. Este servicio de ‘atelier’ no es exclusivo de la marca británica y todas las marcas de coches de lujo tienen una división exclusiva de personalización.

atelier rolls roycepinterest
Rolls-Royce//Car and Driver

Así que, para comprobarlo, nos metemos de lleno en el nuevo showroom del concesionario Rolls-Royce de Sunningdale y allí descubrimos un universo de lujo exquisito y pasión por los detalles, por pequeños que éstos sean. Un concesionario que ha sido reformado durante 18 meses, lo que da idea del nivel alcanzado en el ‘restyling’ de estas instalaciones inglesas que han ampliado su exposición y tiene una nueva terraza desde la que observar la bucólica campiña de Berkshire.

Máximo respeto por el cliente

Para empezar, el edificio ha sido remodelado íntegramente tanto arquitectónicamente como estéticamente, lo que lo hace irreconocible a ojos de antiguos propietarios. La puerta principal de acceso está inspirada en la famosa parrilla Pantheon de Rolls-Royce y está coronada por el Espíritu del Éxtasis.

rolls roycepinterest
Rolls-Royce//Car and Driver

Cuando uno pasa al atelier, aprecia algunos ejemplos de artesanía de la marca británica propiedad de BMW, como chapas de madera, cueros, hilos de bordar en una variedad de tonos muy vivos, así como muestras de lana de cordero. Las muestras de colores son numerosas, aunque se pueden hacer in situ algunas y las pieles están enrolladas en varillas con asas de los famosos paraguas de Rolls-Royce. Todo esto rodeado de una gran moqueta que protege el suelo y unas paredes tapiadas de madera de la mejor calidad posible, además de un gran proyector en la pared en el que se muestra al cliente cómo quedará su coche. Así que, sí, podemos decir que aquí es donde comienza el sueño de conducir un Rolls-Royce…

Headshot of Carlos García-Alcañiz
Carlos García-Alcañiz

Carlos es periodista experto en coches y automoción con una trayectoria en medios de comunicación de más de 16 años. Aterrizó en Car and Driver en 2007, donde su principal ocupación son las pruebas de producto, que muestra a la audiencia a través de vídeos en Youtube y de extensos análisis en web y papel sobre las últimas novedades presentadas. Como apasionado del motor que es, también le podrás leer entrevistando a diferentes líderes del sector, dándote las últimas noticias relacionadas con la conducción y contándote las curiosidades más sorprendentes de las marcas más punteras.

Su extensa trayectoria también abarca trabajos en otros medios como El Mundo, Coche Actual y AutoScout24, e hizo sus pinitos en televisión en el programa de entrevistas “El Círculo Neox”, emitido en el canal homónimo de Atresmedia. Mucho antes de eso, prácticamente de niño, fue lector de Car and Driver, cuando la cabecera estaba dirigida por el piloto de Fórmula 1 Emilio de Villota, con quien tuvo la suerte de trabajar.

Dentro del grupo editorial Hearst España, Carlos ha escrito las secciones de motor de revistas como Qué Me Dices, Emprendedores y deViajes y, ahora lo hace día a día en Car and Driver y ocasionalmente en Esquire. Si no está en la oficina, lo encontrarás en un avión destino a cualquier parte del mundo con un único fin: conducir la última novedad del mercado, tenga pilas o no. ¡Ah! Y es ferviente defensor de los clásicos, aunque ya no tenga su Volkswagen Golf GTI mk3.

Gracias a su trabajo, ha tenido la suerte de correr con un Mercedes-AMG GT en Laguna Seca y ha hecho sus pinitos como piloto en el mítico Nordschleife a los mandos de un BMW M2. También ha conocido sitios tan exóticos como las montañas de Dhofar en Omán, que recorrió a bordo de un Audi RS 3 Sedán; la espectacular Isla de Vancouver, por la que viajó en un Porsche Panamera Sport Turismo; y las playas de Essaouira gracias al salvaje Ford Ranger Raptor.