El Porsche Cayenne se renueva cos cambios estéticos, necesarios en este tipo de actualizaciones de gama para ofrecer una diferenciación con los modelos anteriores. El MY 2015 tiene nuevos paragolpes, con tomas de aire más generosas, nuevos faros y un capó que también ofrece una forma diferente. Detrás los cambios se repiten en el paragolpes, salidas de escape y pilotos. El interior cuenta ahora con un volante más deportivo, con las levas del cambio automático en su parte posterior, nuevos colores, tapicería bicolor y la banqueta trasera rediseñada para ofrecer mayor sujeción, además de la posibilidad de ir calefactada y ventilada.

Otros elementos disponibles en el nuevo Cayenne son los faros de led, un nuevo control de crucero que actúa entre los 30 y los 210 kilómetros/hora y que actúa sobre los frenos para adecuarse a las condiciones de la conducción, acelera y frena adaptándose a las condiciones del tráfico y el sistema de frenado automático en caso de una primera colisión para evitar un choque múltiple, control de ángulo muerto y aviso de cambio involuntario de carril.

La gama del Cayenne se reduce de ocho a cinco motorizaciones y desaparecen el Cayenne V6, el GTS y el Turbo S, al menos de momento.

Todos los propulsores aumentan de potencia y reducen su consumo aunque el único motor nuevo es el del Cayenne S, que ahora es un V6 biturbo. El S E-Hybrid sustituye al anterior Hybrid y la novedad es que ahora cuenta con baterías recargables y con una mayor autonomía en modo eléctrico. Las cinco motorizaciones llevan tracción total permanente, sin reductora y cambio automático Tiptronic de ocho relaciones con convertidor de par pero en ningún caso ese trata del PDK de doble embrague empleado en la gama de deportivos.

Tanto el Cayenne S como el Turbo ganan 20 caballos, mientras que en el caso del Diesel y el S Diesel son 18 y tres los caballos que aumentan respectivamente. El S E-Hybrid utiliza el mismo sistema estrenado por el Panamera, con el mismo motor gasolina V6 que empleaba el anterior Cayenne Hybrid pero con un nuevo motor eléctrico más potente y baterías de ión-litio más capaces y que se pueden recargar tanto en marcha como enchufándolo a la red. El resultado es que la potencia conjunta de los dos propulsores llega hasta los 416 caballos frente a los 380 del anterior. En modo eléctrico puede cubrir una distancia de entre 18 y 36 kilómetros y llegar a una velocidad máxima de 125 km/h. Su consumo homologado, teniendo en cuenta la distancia que puede recorrer en eléctrico, es de 3,4 litros.

Para mejorar los consumos en toda la gama el Cayenne cuenta con un nuevo sistema de parada y arranque automático que detiene el motor un poco antes que en el anterior modelo. También incorpora un sistema que mejora el flujo aerodinámico del motor mediante unas láminas que se abren o cierran en función de las necesidades de refrigeración, además de ajustes en la gestión de los motores y el empleo de nuevos neumáticos más eficientes.

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La suspensión puede ser de muelles o neumática y en este último caso con seis niveles de altura, además de una nueva función que rebaja la parte trasera para facilitar la carga y descarga del maletero al dejar el borde más cerca del cuelo. Entre el equipamiento opcional también están todos los sistemas de ayuda a la conducción fuera del asfalto como los bloqueos de los diferenciales central, trasero y delantero que incluye el programa de conducción fuera del asfalto, responsables de su sorprendente eficacia fuera del asfalto. También se siguen ofreciendo como opción los amortiguadores con control electrónico y las estabilizadoras activas.

Los precios de la nueva gama Cayenne arrancan en los 75.144 euros del Diesel y llegan hasta los 148.879 euros del Turbo. Todas las motorizaciones estarán disponibles en los concesionarios en octubre, con excepción del S E-Hybrid que no llegará hasta noviembre.

Porsche Cayenne