La directora general de Tráfico, María Seguí, afronta en estos momentos su reto más importante desde que lidera el departamento: frenar el aumento de las víctimas en carretera que ha traído consigo el inicio de 2015. Seguí se mostró consciente de de su reto en una comparecencia de prensa en la que mostró los primeros datos negativos en cuanto a siniestralidad desde el año 2002.

La directora manifestó que "ante la mejora económica hay un aumento de la movilidad y eso conlleva un riesgo de accidente mayor". Sin embargo, subrayó Seguí, "es ahora cuando más tenemos que esforzarnos para seguir reduciendo tanto los accidentes como la gravedad de los mismos".

En total, hablamos de 222 víctimas registradas en nuestras carreteras hasta el día 22 de marzo, mientras que el año pasado hasta el día 31 de marzo había contabilizadas 220. El dato es más preocupante si nos centramos en los meses de enero y febrero, los que más subida registraron y es que según detalló María Seguí, "en marzo no ha sido así". De momento, hay contabilizadas diez víctimas menos que en el curso anterior, un motivo "para seguir peleando cada segundo para que esta situación no cambie", enfatizaba la directora.

Durante los últimos años la bajada de los fallecidos en carretera había sido una constante desde el año 2002 cuando en este mismo periodo se contabilizaron 1.278 fallecidos. El año 2008 fue el en el que hubo un mayor descenso, pasando de 901 a 741 víctimas.

Las asociaciones de automovilistas y también las de los familiares de difuntos siguen reclamando una mejora en el estado de las carreteras así como la eliminación de puntos muertos y redistribución de los radares.

Lettermark
Jose Carlos Luque

Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.