El sector de la automoción está de enhorabuena, tras sucesivas caídas de las ventas desde que comenzó la crisis en 2008, el número de matriculaciones en España no deja de crecer. En julio se alcanzó un volumen de 83.223 unidades, convirtiéndose en el mejor mes de julio desde 2009. Este incremento del 10,9% supone once meses de crecimiento continuado en el mercado del automóvil, y acumulando 540.000 ventas en lo que llevamos de año, la cifra más alta desde 2010. El objetivo al final de este ejercicio es alcanzar las 850.000 unidades.

Seat Ibiza y Seat León los modelos más vendidos, Volkswagen la marca líder del mercado

Por marcas es Volkswagen la que lidera la tabla de ventas desde enero hasta julio con más de 8.500 unidades matriculadas. A la marca alemana le siguen Seat y Renault, con algo más de 6.000 coches vendidos cada una. En cuanto a las ventas por modelos durante estos siete meses, el líder es el Ibiza, seguido muy de cerca por su hermano mayor el León, con más de 19.000 unidades vendidas del primero y unas 18.500 del segundo.

Por segmento son los coches urbanos y los compactos los que más ventas registran, muy por encima del resto, aunque los todocamino son los que están experimentando un mayor crecimiento, sobre todo los de menor tamaño, que con el lanzamiento de modelos como el Renault Captur, Peugeot 2008, o el inminente Jeep Renegade representan un sector en alza.

Si tomamos los datos por tipo de carburante, el motor Diesel sigue siendo el rey de nuestro mercado, vendiéndose el doble de automóviles con este tipo de mecánicas que con propulsores gasolina. Los híbridos y eléctricos apenas suponen un 1,2% de las ventas de este periodo, aunque esta cifra ha experimentado una ligera mejoría respecto a años anteriores.

Sin duda, estos datos tienen mucho que ver con la buena acogida del Plan PIVE 6, que se constituye como un elemento básico para recuperación del consumo y de la confianza del consumidor. De esta manera el Programa de Incentivos al Vehículo Eficiente (PIVE) ayuda a confirmar la recuperación del consumo privado sugerida por los indicadores parciales de demanda, especialmente de bienes duraderos. En este sentido se hace inevitable pensar en una renovación de dicho Plan, que en su séptima edición es muy probable que se limite solo a vehículos españoles, con la intención de incentivar así las ventas de coches fabricados en nuestro país.