En las 24 horas de Le Mans rara vez los planes salen bien. De hecho, hacerlos suele ser el primer paso hacia la catástrofe, aun cuando dominas la carrera de forma plácida. Para bien o para mal, no hubo competición dentro de Toyota. Sin que se haya profundizado en el tema, el vehículo #8 de Fernando Alonso, Nakajima y Buemi, no fue capaz en ningún momento de la carrera de igualar el rendimiento del #7 de Pechito López, Kobayashi y Mike Conway.

Todo estaba destinado a un final feliz para el fabricante japonés. Un acuerdo pacífico donde todos acababan contentos. El #8 ganaba las 24 horas de Le Mans de 2018, el #7 ganaba las de 2019, y además, el #8 se llevaba el mundial y estarían igualmente contentos pero en efecto, una vez más los planes en la carrera de resistencia más famosa del mundo no salieron bien.

Hacia el final de la carrera, Pechito López, en modo crucero y sin arriesgar, atrapó a un par de competidores en lucha. El argentino tuvo que ir a una zona excesivamente sucia, especialmente tras tantas horas de carrera, y acabó pinchando uno de los neumáticos de su Toyota TS050 Hybrid. Fue lo que se conoce como un pinchazo lento. Las sensaciones del piloto se confirmaron gracias a los distintos sensores de los que dispone el vehículo, por lo que el argentino ralentizó la marcha para no provocar daños en su vehículo.

Land vehicle, Vehicle, Car, Race car, Sports car, Sports car racing, Motorsport, Racing, Endurance racing (motorsport), Supercar, pinterest

No había motivos para tomar riesgos, pues el margen con el resto de competidores, el #8 incluido, era suficiente. El #7 llega a boxes y le cambian el neumático pinchado, saliendo de nuevo a la pista. El piloto tardó poco en cerciorarse de que algo seguía sin funcionar bien, captándose su desesperación a través de la radio. El equipo le había cambiado el neumático que creían pinchado, y que no era el que realmente había que cambiar. Tocaba dar otra vuelta completa a la pista, y hacer una nueva parada en boxes. No solo perdían el liderato, sino que además el #8 sacaba una suculenta ventaja. Todo lo que podía salir mal en esos momentos, salió mal.

¿Por qué Toyota no aseguró y cambió todos los neumáticos aprovechando la parada en boxes? Pascal Vasselon dio una explicación razonable al respecto. El responsable de Toyota argumentó que habían usado todos los juegos de neumáticos nuevos disponibles, y que todos los que podían montar acumulaban cuatro relevos, lo que en teoría es su vida útil.

Technology, Recreation, Electronic device, Team, pinterest

Sí, Toyota pudo elegir cambiar todos los neumáticos, pero vio cierto riesgo en realizar casi una hora de carrera con las gomas con tanto desgaste, por lo que optaron por cambiar solo el que a priori era el neumático pinchado. Y que obviamente, no era el que había que cambiar. Los sensores arrojaron datos erróneos, y ni piloto ni equipo pudieron captar el error a tiempo, debido precisamente a las características de un pinchazo lento.

Para colmo de males, el pinchazo llegó al borde de un momento determinante, ya que al #7 no le llegaba el combustible para llegar a final de carrera, lo cual hubiera sido muy diferente de haber ocurrido unos minutos después, pues con el pinchazo hubieran podido cargar combustible hasta final de carrera, conservando el liderato. Definitivamente, no era el día…

Headshot of Sergio Martínez
Sergio Martínez

Experto en Fórmula 1 y Motorsport, especializado en el mundo de las carreras y la competición a motor, la cual lleva cubriendo más de una década en diferentes medios del sector. Obsesionado de las categorías de formación y desconfiado por naturaleza de todo lo que le cuentan.