Gran primera toma de contacto de Fernando Alonso con el circuito de Le Mans. Aunque el asturiano pudo rodar en el trazado francés durante varias sesiones en el simulador, la sesión matutina fue la primera vez que Alonso se puso a los mandos del Toyota para rodar en la pista la vida real. El proceso de adaptación no le fue nada mal, pues marcó el mejor tiempo de la acortada sesión con un registro de 3’21’’468. El asturiano compartió el bólido con Kazuki Nakajima, Sebastien Buemi y el reserva Anthony Davidson, con este último realizando labores de puesta a punto.

La sesión tenía programado su final a las 13:00, pero una bandera roja hizo que la actividad de la mañana terminara antes de tiempo. La razón de esta interrupción fue un incidente que tuvo como implicados al Aston Martin #98 con Marco Sorensen al volante y al SMP #35 de Harrison Newey. El danés sufrió un accidente cerca de la zona de Indianápolis, mientras que el británico consiguió regresar a boxes. Debido a la necesidad de realizar reparaciones, la sesión se dio por terminada.

Destaca la igualdad mostrada por Toyota y Rebellion en esta primera sesión. La unidad #3 separó a los dos bólidos de la marca japonesa y fue mejorando sus tiempos sin que su posición variara. Thomas Laurent, a bordo del Rebellion, se quedó a tres décimas del tiempo marcado por Alonso, mientras que el Toyota #7 con Mike Conway a los mandos fue siete décimas más lento que la unidad hermana.

El G-Drive #26 encabezó la clasificación en la categoría LMP2 con un registro de 3’30’’176, quedando por delante del Idec Sport #48. El DragonSpeed #31 finalizó en tercera posición, por delante del Graff #39. Uno de los favoritos a hacerse con la victoria de la clase, el Alpine #36, terminó la sesión en quinto lugar, seguido por el TDS Racing #28 y el G-Drive #40.

Ford comenzó a mostrar sus cartas en la categoría GTE-Pro. El fabricante del óvalo consiguió que sus cuatro coches lideraran la clasificación con el #67 encabezando el escuadrón con un registro de 3’53’’008, que sacó nueve décimas a la unidad #66. El primer coche no Ford fue el Porsche #91 con la mítica decoración de Rothmans, aunque se quedó a un segundo y medio del tiempo de referencia. El Corvette #63 de Antonio García finalizó en sexta posición.

En GTE-Am la clasificación tuvo al Ferrari #61 de Clearwater Racing en cabeza gracias a un tiempo de 3’58’’569, aunque el Porsche #77 de Dempsey-Proton fue apenas seis milésimas más lento. La tercera posición de la tabla fue para su unidad hermana, que superó al también Porsche de Gulf Racing. En quinto lugar finalizó el Aston Martin #90 de TF Sport, por delante del Ferrari #84 de JMW Motorsport.

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