Mark Webber se ha postulado a favor de los cockpits cerrados en la Fórmula 1 en medio de la controversia sobre su futura aplicación tras el reciente fallecimiento de Justin Wilson en la IndyCar después de ser golpeado en su cabeza por restos de fibra de carbono de otro monoplaza.

La FIA había estado trabajando en ello desde el accidente que sufrió Felipe Massa en la clasificación del Gran Premio de Hungría de 2009, donde fue golpeado en su casco por un muelle suelto a gran velocidad y que le mantuvo fuera de los circuitos hasta la siguiente temporada.

Fue entonces cuando se consideró la idea de cubrir los monoplazas con una cúpula similar a la de los cazas de combate, aunque se desechó por las dudas sobre la resistencia de la misma ante los impactos y las dificultades que podría causar a la hora de extraer al piloto en caso de accidente.

Ahora trabajan en nuevos conceptos que probarán a finales de este mes en busca de encontrar una solución final aplicable en el futuro a corto plazo para proteger mucho más las cabezas de los pilotos, algo que Mark Webber cree que es inevitable que ocurra y espera que así sea.

"Soy purista, pero me gustaría verlos cerrados (los cockpits). Están retrasando lo inevitable ahora. Va a llegar", ha dicho a la BBC. "En 10 años estén probablemente ahí, así que vamos a llevarlo hacia delante y encontrar una manera de que sea elegante y seguro para la extracción. Hay suficientes expertos para hacer que ocurra", ha concluido.