"El mismo que el año pasado", ha señalado Dietrich Mateschitz en una entrevista esta semana con la agencia alemana de noticias DPA. "Su coche campeón del mundo". En 2010, cuando el joven teutón se convirtió en el campeón más joven de la historia de la F1, Mateschitz decidió enviar el RB6 creado por Newey a la casa de Vettel en Suiza.

La mayor parte del personal del equipo Red Bull se muestra precavido respecto a las posibilidades del joven de 24 años de hacerse con su segundo campeonato consecutivo este fin de semana en Singapur, pero el multimillonario Mateschitz es más honesto. "Ya anticipamos que, una vez más, conseguiríamos ambos títulos este año", ha manifestado el empresario austriaco de 67 años.

El propietario de Red Bull guarda grandes elogios para Vettel, quien llega este fin de semana a la carrera nocturna de Singapur con una diferencia tan amplia que hasta sus rivales por el campeonato han tirado ya la toalla (ver Clasificación Mundial). "El hecho de que Sebastian es muy capaz, lo sabíamos", apunta Mateschitz. "Que fuera a pilotar tan consistentemente durante tanto tiempo, ha sorprendido a mucha gente".

Mientras, el periodico Bild señaló que el regalo que recibirá Vettel por su segundo título, el chasis RB7 que él mismo ha bautizado de forma extraoficial como 'Kinky Kylie' (Kylie la Pervertida), está valorado en casi 1 millón de euros. Y eso sin contar el motor Renault, cuyo precio se estima en cerca de 200.000 euros.

"Lentamente, su garaje en Suiza se está quedando pequeño", ha confirmado el asesor técnico del equipo, Helmut Marko.

Pero, ¿qué piensa Vettel sobre su regalo? "No estoy pensando en eso porque aún no he ganado nada", manifestaba el piloto en el aeropuerto de Zurich justo antes de tomar un avión hacia Singapur.

Vettel declaró al canal alemán Eurosport que no cuenta con tener que celebrar su segundo título este fin de semana. "El momento en que suceda no tiene importancia. Con que seamos primeros tras la última carrera, estará bien”, señaló el alemán.

Por su parte, el diseñador del RB7, Adrian Newey, ha insistido en que su pupilo no sacará la calculadora este fin de semana bajo las luces artificiales del trazado asiático. "Seb no quiere dejarse llevar hasta el campeonato del mundo, él realmente quiere ganarlo", manifestó el ingeniero británico al diario The Sun.