Stoffel Vandoorne habla sobre su complicado debut en F1, especialmente al inicio de la temporada, donde no terminó por adaptarse a un poco fiable McLaren-Honda. El piloto belga sufrió durante la primera mitad del año, aunque la dinámica comenzó a cambiar desde Canadá y Bakú.

“Sabía que el inicio no estaba siendo suficientemente bueno, pero también sabía que lidiaba con muchos problemas. Las primera carreras no fueron mis estándares, pero es solo mi primera temporada en Fórmula 1, así que tuve que desarrollar este tipo de relación con el equipo, con mis ingenieros. Fue difícil hacerlo debido a todos los problemas, explica a Motorsport.com.

"Cuando las cosas empezaron a ir un poco mejor, tuve más tiempo en pista, pasé más tiempo en la fábrica, revisé los datos y pasé más tiempo en el simulador, luego, todo comenzó a desarrollarse de la manera correcta. Mónaco, Canadá y Bakú fueron momentos clave en los que recopilamos mucha información, señala.

"Mónaco, Canadá y Bakú fueron momentos clave"

Además, el compañero de Fernando Alonso reconoce que no han estado en la posición que les gustaría y se encomienda a un mejor año en 2018, donde un cambio como el nuevo motor Renault podría darles el empuje necesario para volver a pelear por podios y, quién sabe, si victorias.

"Definitivamente no es la posición en la que quiero estar; prefiero pelear en el frente y por las victorias, ahí es donde probablemente me siento mucho más cómodo por todo lo que hice en el pasado", apunta.

"Creo que el equipo va en la dirección correcta. Se avecinan muchos cambios que son muy emocionantes, pero en términos de resultados reales sigue siendo muy difícil de decir. En F1 es tan difícil de predecir, tienes que esperar hasta las pruebas de invierno, pasar a la primera prueba y luego sabes lo bueno que eres", concluye.