Carlos Sainz ha sido uno de los seis pilotos seleccionados por la FIA para atender a la conferencia de prensa del jueves previo al GP de México. En su llegada al Autódromo de los Hermanos Rodríguez, el de Toro Rosso ha hablado en primer lugar sobre su monoplaza y el futuro del equipo de cara a 2017.
"Creo que Toro Rosso progresa de forma constante hoy en día. Obviamente este año nos ha dañado el déficit de velocidad que ya saben todos. Pero si te fijas en el coche y cómo rendía en Austin, debo decir que es un monoplaza más que decente. Me gusta mucho pilotarlo. James Key y su equipo hacen un trabajo similar para explotar el potencial completo tanto mío como de Daniil (Kvyat) y creo que podemos avanzar en el Campeonato de Constructores. Tenemos a la gente adecuada y simplemente nos falta velocidad punta para lograr mejores resultados", ha analizado el español.
Esta misma semana, Bernie Ecclestone anunció su idea de poner muros en todos los circuitos y así evitar que los pilotos se vayan recto en muchas curvas con anchas escapatorias. Sainz, aunque ha afirmado que está encantado con los nuevos desafíos, considera que la seguridad es lo primero.
"Para mí la seguridad siempre es lo primero, pero también son importantes los desafíos para el piloto. Caminé por el circuito esta mañana y cuando ves cemento en las escapatorias como en Austin, pienso que es algo bueno para la seguridad, pero seguro que podríamos usar artículos para hacerlo un reto más complicado, pero asegurar que usas sólo un poco más de la pista. Por el momento no tiene penalización saltarte el punto de frenada porque simplemente no bloqueas para ir recto y cuidas los neumáticos", ha explicado Sainz.
En su llegada a México, lo que más une a Sainz con el país norteamericano es su apodo de 'chili'. Sainz lleva un logo de él en su casco y ha querido explicar de qué lugar sale este apodo. Sainz también ha advertido que lejos de gustarle el picante, lo odia.
"Mi apodo viene gracias a mis amigos, quizá por esas noches y cosas así. A veces se emborrachan y tienen la idea de que mi nombre pasa de Carlos a Charlie, y de Charlie a 'chili', y así es como fue... No me gusta el chili, esto es lo interesante del asunto, porque odio el picante. Ayer fui a un restaurante de tacos y no pude comerlos porque estaban demasiado picantes. El chili no es mi favorito, no", ha simplificado el #55.
Por último, Sainz ha tenido que hablar sobre su batalla en la vuelta 56 del pasado GP de Estados Unidos con Fernando Alonso, alguien que siempre ha sido su referencia en el máximo nivel del automovilismo y que ahora está a su par como rival.
"Quizá la batalla con Fernando sí fue un poco más especial porque crecí con sus carreras desde 2003. Las he visto todas y de repente estaba en una lucha contra él en la última vuelta por una quinta posición. Fue especial, pero en ese momento no te das cuenta de lo que ocurre. Quizá cuando te vas a dormir, piensas más en ello. Fue emocionante y lo disfruté mucho. No tuve mucho agarre para ser más fuerte, pero definitivamente me lo pasé bien", ha expresado para concluir.
