En una reciente entrevista para la web GPUpdate, el nacido en Perth hacía hincapié en lo que supuso para él compartir uno de los volantes del equipo Red Bull junto a Sebastian Vettel, cuando el teutón era el piloto de referencia dentro de la escudería radicada en Milton Keynes, y de la propia parrilla, por ser el defensor de la corona de campeón del mundo, después de años de victorias.

Todo viene a resultas de la temporada 2014, cuando Ricciardo pudo destacar nada más llegar como el único piloto que plantó cara al potente equipo Mercedes AMG Petronas, adjudicándose tres victorias, y por tanto tomando alas, que podía contar con opciones de adjudicarse el campeonato mundial de disponer de un bólido similar al W05: "Sí, creo que sí. Yo creí en ello, pero era el año junto a Vettel donde yo estaba mentalizándome en que podía hacerlo. Creo que pude haberlo logrado si hubiera estado con el coche adecuado ese año", ha dicho.

"Fue muy importante, por muchas razones. Aprender de él y de su experiencia fue genial, y realmente fue valioso, porque sabía que si podía ser competitivo frente a Sebastian Vettel, todo el mundo me tomaría en serio. Yo sé que cuando firmé con Red Bull Racing, había algunas personas que no pensaban que yo fuera la mejor solución para ellos. Quería demostrar que podía ser rápido, adelantar y mantenerme dentro de mis posibilidades. Fue un año muy positivo. Aprender de Vettel, de su experiencia, fue genial, muy provechoso", ha confesado Ricciardo de entrada.

Al profundizar más en el hecho de que fue lo que destacaría de un tetracampeón del mundo, de sus métodos, de su forma de concebir el trabajo, Daniel Ricciardo, no tuvo reparos en admitir la pasión, la firma característica de 'Seb', su comunicación con el staff técnico: "Creo que la forma en que trabaja con el equipo. Todavía era muy respetuoso y se las arreglaba para conseguir lo que quería. Siempre iba al grano y detallaba toda la información. Se podría decir que era experimentado, apasionado y que la F 1 es su vida. Yo diría que la forma en que mantuvo a todos unidos fue bastante impresionante", ha añadido seguidamente.

Más tarde, sobre lo que ha supuesto la gran noticia del arranque del campeonato sin duda, el cambio de pilotos entre Daniil Kvyat, descendido a Toro Rosso, y Max Verstappen, ascendido a Red Bull, al llegar a la primera cita europea, el aussie confesó: "A Max aún le queda mucho por aprender, pero ya ha aprendido mucho en muy poco tiempo", ha confesado Ricciardo. "Fue un momento caótico. Todo el mundo tenía la curiosidad de saber lo bueno que era Max, obviamente, es muy bueno. En Barcelona me sorprendió. Estaba en cuarta posición y pude verlo en la parte superior de la tabla de tiempos, y yo estaba pensando, '¡wow, realmente va a ganar esta carrera!".

"Ha obtenido algunos resultados realmente buenos. Es joven, pero se puede decir que ha estado viviendo las carreras durante mucho tiempo. Todavía le queda mucho por aprender, supongo, pero ya ha aprendido mucho en poco tiempo. Max es un poco como Vettel, su vida son las carreras, eso es realmente lo que le gusta y lo que ha hecho desde una edad temprana. Si sigue mejorando como lo hace, entonces será duro para una gran cantidad de pilotos. ¡Será un gran rival!", ha explicado a continuación.