Son tiempos difíciles para Sauber. La escudería de Hinwil pasa por un delicado momento económico en el que la financiación del equipo parece no ser el adecuado, incluso tienen importantes problemas para cumplir con el pago a sus proveedores. Inmersos en una crisis económica que se espera se resuelva con la reciente firma de tres compañías rusas, Peter Sauber afirma que éste está siendo uno de los momentos más difíciles de su experiencia en el deporte de motor.

El fundador de la escudería Sauber afirma que, pese a los problemas económicos, la política de la escuadra no es despedir a trabajadores y reconoce la seriedad de la situación. "No hemos despedido a nadie y hemos pagado los salarios a tiempo. Pero no puedes pagar a ciertos suministradores y a otros no. Tenemos que tratar a todos por igual. La situación es seria. Es una de las situaciones más difíciles que he tenido en el deporte de motor", señalaba el suizo al diario Sonntagsblick.

Sin embargo, solo los grandes equipos parecen ajenos a los contratiempos financieros. Según Sauber, cuando se puso de nuevo a los mandos de la escudería tras la marcha de BMW del equipo y la pérdida de Petronas como patrocinador fueron momentos difíciles aunque optó por luchar y continuar adelante. "Hay muchos equipos con problemas enormes. No soy un soñador. Sabía en lo que me estaba metiendo (cuando volvió a coger las riendas del equipo). Lo peor fue que en ese mismo momento también perdimos a nuestro socio Petronas. Podría haber tenido una vida tranquila, pero el cierre del equipo me hubiera dañado más que lo que lo hace la situación actual", admitiía.

A pesar de la gravedad de la situación, Sauber respira cierto alivio al confirmar un acuerdo con tres compañías procedentes de Rusia que inyectarán un importante impulso económico para rescatar a la escudería. Además, la firma con las empresas incluye la llegada del piloto ruso de la Fórmula Renault 3.5, Sergey Sirotkin, como parte del programa de desarrollo para formarle en su camino a la Fórmula 1.