Toro Rosso tuvo un mal comienzo en la jornada de viernes correspondiente al Gran Premio de Brasil. Pierre Gasly y Brendon Hartley apenas pudieron rodar durante el primer entrenamiento libre debido a distintos problemas de motor. El francés tuvo que quedarse viendo como los mecánicos reemplazaban su motor en el box, mientras que el neozelandés se vio obligado a presenciar el resto de los entrenamientos en el interior del trazado al no poder regresar al garaje.
El equipo de Faenza tuvo que reemplazar el MGU-H de la unidad de potencia del galo, por lo que recibió una nueva penalización en parrilla. A la sanción de diez puestos con la que empezó el fin de semana se le suman otras diez posiciones por tener que instalar su noveno MGU-H de la temporada en el monoplaza. Además, Gasly también contará con un nuevo turbo, lo que hace que su penalización total ascienda a 25 puestos en parrilla.
No se ha confirmado que Hartley vaya a recibir otra sanción, pero no es para nada descartable teniendo en cuenta el fallo que sufrió en la primera sesión de libres.
