En un circuito rápido, si queremos complicar las cosas, no hay nada como poner en pista coches con menos carga aerodinámica y más velocidad punta. Y si no bastara, habría que invocar a los dioses de la lluvia, que esta tarde han sido generoso en Spa-Francorchamps, donde Nico Rosberg ha logrado una de las Pole Position más difíciles de las siete que ya suma esta temporada, por delante de un Lewis Hamilton que se ha quejado de un problema de balance en la frenada que ha afectado a su confianza en ciertos puntos clave del circuito.

Las variables condiciones del asfalto siempre han sido delicadas para los pilotos, con un agarre que empeoraba según caían algunas gotas de lluvia y mejoraba con el más mínimo ascenso de la temperatura. El propio Rosberg ha fallado en el sector inicial de la penúltima vuelta cronometrada, pero su coequipier se ha equivocado en La Source cuando afrontaba su última y definitiva cronometrada, quién sabe si a causa del antedicho problema de frenos, y esto se ha traducido en 128 milésimas a favor del Mercedes con el dorsal 6.

Un mundo por detrás, Sebastian Vettel y Fernando Alonso se han disputado la tercera posición hasta la bandera a cuadros. Alonso se ha ido ligeramente largo en Eau Rouge en su mejor giro, y eso le ha pasado factura al asturiano cuando ha llegado a meta, donde ha cedido apenas 69 milésimas frente al tetracampeón de Red Bull, beneficiado por la lluvia porque le ha quitado un punto de importancia a los motores.

Sólo un par de pilotos han elegido los neumáticos de agua extrema para empezar la sesión, pero poco después los intermedios han tomado el relevo definitivo. Fernando Alonso ha optado por la configuración de media-baja carga aerodinámica en su Ferrari, así que ha descartado la de baja que había utilizado en los Libres de esta mañana, una decisión lógica a la vista de las condiciones de la pista.

La confianza de Rosberg se ha plasmado en su actitud desde el primer momento, no en vano ha sido uno de los últimos coches en pasar por meta para marcar un primer tiempo de referencia. El alemán se ha situado segundo a dos décimas de Hamilton, que finalmente ha perdido esa primera posición en favor del propio Rosberg. Kimi Räikkönen ha estado fuera del Top 16 hasta que faltaban menos de cinco minutos para el final, cuando se ha situado quinto. Peor le han ido las cosas a Esteban Gutiérrez, que ha sufrido problemas técnicos en Stavelot y no ha podido continuar con la sesión, aunque se ha evitado la bandera roja por la rápida actuación de los comisarios.

No ha habido interrupciones, pero sí hemos visto otras salidas de pista, especialmente la que ha protagonizado Daniel Ricciardo en su mejor vuelta de la tarde. El australiano se ha ido a la hierba justo antes de la frenada para la chicane Bus Stop, y de puro milagro ha podido volver al asfalto, no ha perdido prácticamente la trazada en la doble curva final y aún ha mejorado sus registros para terminar quinto, aunque dos décimas por detrás de su compañero de equipo. Sin este error, Daniel el sonriente hubiera terminado fácilmente en la tercera posición.

También Pastor Maldonado ha hecho su pirueta en la sesión, un trompo en la última chicane cuando peleaba por pasar a la Q2. El venezolano ha perdido la trasera del Lotus y, aunque no ha calado el motor y ha podido incluso afrontar un último giro cronometrado, finalmente ha terminado fuera del Top 16 y, por tanto, ha caído eliminado en la primera fase, donde Jules Bianchi ha dado la gran sorpresa de la tarde, al clasificarse decimocuarto en el primer corte y firmar finalmente el decimosexto lugar en parrilla, gran mérito para el francés de Marussia que ha vuelto a dar una nota de color con un coche que apenas lo consiente.

Ampliaremos esta crónica en breve. Hasta entonces, podéis consultar los tiempos y comentarios del GP de Bélgica aquí.