Mika Salo, comisario piloto durante el Gran Premio de Estados Unidos, reconoce haber recibido amenazas de muerte por su responsabilidad en la sanción a Max Verstappen en la última vuelta de la carrera, lo que privó al holandés de subir al tercer cajón del podio, posición que le arrebató a Kimi Räikkönen en las últimas curvas.

Los comisarios, entre los que se encontraba Salo, decidieron penalizar al piloto de Red Bull por adelantar al finés por fuera de los límites de la pista y esa decisión ha enfadado a los seguidores del joven piloto.

"He recibido varias amenazas de muerte, especialmente de los Países Bajos. Eso nunca debería ser tolerado", asegura Salo a Sport1.

Por su parte, Ross Brawn, director deportivo de la F1, cree que deben revisar el procedimiento y metodología de las sanciones junto a la FIA y los equipos, pues recuerda que cuenta con la mejor tecnología para actuar justamente y con celeridad.

"Una vez se calme todo, necesitamos revisar esto junto con la FIA y los equipos. La tecnología es cada vez mejor para ayudar a los reguladores en todos los deportes, incluida la Bundesliga o la Serie A. En la Fórmula 1, tenemos todo lo que necesitamos para una excelente tecnología de vídeo. Entonces necesitamos encontrar formas de traducir esa tecnología en juicios precisos y consistentes", concluye