El Gran Premio de Bélgica dejó claro que Ferrari es, ahora mismo, el rival más fuerte. La escudería italiana perdió una Pole casi cantada el sábado debido a la lluvia, aunque Sebastian Vettel no falló el domingo para llevarse una plácida victoria. El piloto alemán terminó a 11 segundos de su principal adversario por el Mundial. Lewis Hamilton casi no podía creérselo al final de la carrera.

Llegado el momento de hacer análisis de lo sucedido en las últimas semana, Toto Wolff, jefe de equipo de Mercedes, reconoce que llevan varias pruebas a un nivel ligeramente inferior que Ferrari. “El último circuito donde hemos sido más rápidos ha sido Silverstone”, afirma. “Fuimos bien en Austria y Francia, y desde entonces Ferrari ha ido más rápido. Budapest no fue una sorpresa y Spa siempre ha sido un poco complicado para nosotros. Tengo mucha curiosidad por ver qué pasa en Monza. El año pasado dominamos todo el fin de semana y Ferrari tuvo el peor del año”, continúa.

No obstante, Wolff es consciente de que no hay ningún truco de magia de última hora que les puda devolver inmediatamente al frente de la parrilla, o al menos para recuperar el ligero margen de ventaja que poseían sobre Ferrari. Es una carrera de fondo y, por el momento, en Maranello llevan las de ganar.

“Se trata de optimizar el paquete, la calibración, así que espero que esto siga trayendo rendimiento. Monza debería ser otra buena actualización. No tenemos ninguna fórmula mágica. No vamos a encontrar nada de repente que nos dé tres décimas. Esta es una carrera de rendimiento y esto marcará la diferencia de perder y ganar el Mundial”, concluye.