Mercedes ha empezado la temporada 2019 de Fórmula 1 de manera imparable. El equipo de Brackley llegó a Australia en una aparente desventaja con respecto a Ferrari, que tenía colgado el cartel de favorita después de mostrarse temible en los test de pretemporada. Una vez comenzó la acción en Melbourne, los papeles se invirtieron y Mercedes pasó a ser la estructura a batir.
Hasta ahora, nadie ha sido capaz de batir a Mercedes en carrera, acumulando cuatro dobletes que se han convertido en el mejor inicio de temporada en la extensa historia de la Fórmula 1. La estructura alemana superó el espectacular comienzo de campaña de Williams en 1992 y solamente se les ha escapado la pole en Bahréin, donde Charles Leclerc fue el más rápido en clasificación.
Lewis Hamilton cumplió con las expectativas y estuvo delante en las cuatro carreras disputadas hasta el momento, pero la verdadera buena noticia para Mercedes es el espléndido estado de forma de Valtteri Bottas en este inicio de temporada. Tras acabar 2018 sin una victoria, el finés ya acumula dos triunfos y actualmente es el líder del mundial con un punto de ventaja sobre su compañero, concretamente el punto obtenido por la vuelta rápida en Australia.
Esta es la primera vez que un compañero de Hamilton en Mercedes ha estado a su altura desde Nico Rosberg en 2016. El alemán es el único piloto que ha podido arrebatarle un título al británico desde el comienzo de la era híbrida y el gran comienzo de temporada de Bottas podría plantear una situación similar en la estructura de Brackley, pero en el equipo confían en que no derive en una rivalidad.
Hamilton y Bottas mantienen una relación amistosa que Mercedes espera que se mantenga a pesar de que ambos se han posicionado como los principales candidatos a hacerse con el título. “Tenemos a dos pilotos con la ambición y la habilidad de ganar un campeonato. Depende de todos nosotros ser conscientes de esa situación y recordar que Vettel o Leclerc pueden meterse rápidamente en la pelea, así que no tenemos que dejarnos llevar”, declaró Toto Wolff.
“Hay 21 carreras en el calendario y la relación entre ambos pilotos importa para evitar lo que pasamos con Nico y Lewis. Creo que tenemos la suerte de que tengan una relación muy buena. Se llevan bien. No hay malos rollos por detrás y estoy contento por ello, pero tenemos que ser conscientes. Hemos visto una relación deteriorarse anteriormente”, añadió.
Para evitar una nueva guerra interna en Mercedes, Wolff está dispuesto a intervenir si fuera necesario con advertencias para sus pilotos. “Queremos que sean leones en el coche, así que no esperamos un comportamiento de ovejas, pero el respeto tiene que mantenerse. No permitiríamos que una relación entre pilotos se deteriorara hasta un punto donde sea negativo para el equipo. Si ese fuera el caso tras lo de Nico y Lewis, sacaremos tarjetas amarillas y rojas”, explicó.
