La temporada 2019 de la Fórmula 1 está marcada por la introducción de una nueva normativa técnica. Los monoplazas han sufrido una serie de transformaciones aerodinámicas derivadas de un reglamento cuyo objetivo es mejorar el espectáculo de las carreras. Los cambios están destinados a que los bólidos generen menos carga aerodinámica y así puedan seguirse unos a otros de una forma más sencilla.

De esta manera, los coches tendrán mayores oportunidades de adelantamiento tras varios años donde la mayor parte de los cambios de posición en pista se dieron por paradas en boxes. Como el resto de la parrilla, Mercedes ha tenido que adaptar su nuevo vehículo a la normativa que ha llegado este año. James Allison, el gran artífice del W10, explica en este vídeo los principales cambios en los monoplazas con respecto al año pasado.

Las mayores modificaciones se encuentran en el alerón delantero, que cuenta con menos elementos aerodinámicos y tiene una mayor anchura. El alerón trasero también ha sufrido grandes cambios, pues se ha aumentado su tamaño y su altura para evitar que las turbulencias lleguen al coche que tiene justo por detrás. Los conductos de freno son otra pieza que se ha simplificado para que no contribuya tanto al flujo del aire.

No solo Mercedes ha tenido que adaptarse a la nueva normativa, sino que también ha tenido que innovar con respecto al W09 en áreas donde los de Brackley pensaban que habían alcanzado el límite. El desarrollo del monoplaza solo acaba de empezar, pues el vehículo irá recibiendo actualizaciones a lo largo de la temporada para mantener el dominio que Mercedes ha establecido en Fórmula 1 desde el comienzo de la era híbrida.