Mercedes ha hecho parecer fácil lo difícil. Bien es cierto que ha habido épocas de dominancia en la Fórmula 1, pero la forma en lo que han hecho merece especial mención. Y no solo eso, sino que se están pudiendo mantener durante un buen tiempo, ya que, de vencer esta temporada, esta será la sexta corona consecutiva en el Gran Circo.
Por todo ello y por la evolución que han ido sufriendo los distintos coches que se han creado en Brackley que desde la cúpula de Mercedes están encantados con la capacidad de adaptación de sus trabajadores. De ello se ha encargado de hablar Toto Wolff, director del equipo, a través de Autosport. El austríaco ha querido recalcar que el que fue punto débil del Mercedes, ha dejado de serlo.
“Se puede ver el desarrollo de este equipo. En los primeros días de las regulaciones en cuanto a la unidad de potencia, contábamos con un coche muy rápido con bajo arrastre en las rectas y en la que el motor hacía la mayor parte”, comenta Wolff ante una evidencia y es que en los primeros años en los que Rosberg y Hamilton compartieron box, si algo destacaba por encima de todo el coche era la velocidad que era capaz de transmitir a los bólidos de Brackley.
“A lo largo de los años, creo que el chasis y la unidad de potencia se han fusionado con el objetivo de marcar el mejor tiempo de vuelta posible. Seguimos teniendo un motor impresionante, pero lo mejor es que hemos sido capaces de hacer un chasis que a su alrededor cuenta con más carga aerodinámica”, insiste el jefe de Mercedes.
“Ya no somos el coche más rápido en recta pero lo hemos solventado con la mejora aerodinámica que hemos hecho. Si me hubieses dicho el año pasado que este año íbamos a ser con solvencia primero y segundo en la clasificación de Mónaco, no te hubiera creído”, concluye un Toto Wolff satisfecho con los suyos que, año tras año, le llenan de orgullo.
