La caja de Pandora ha sido abierta, y es que Mercedes se encuentra en el ojo del huracán después de que sus rivales hayan descubierto que la escudería de las flechas de plata gozó de la privilegiada oportunidad de acumular 1000 kilómetros con Pirelli en el Circuit de Catalunya, unos test que se celebraron una vez hubo terminado el Gran Premio de España.

Si bien Paul Hembery asegura que los de Ross Brawn no sabían exactamente qué probaban cuando estaban en pista, sí ha trascendido que los W04 rodaron con las novedades que la marca milanesa llevará a Canadá para acabar con la laminación de los P-Zero, así como también con las especificaciones de los compuestos de la próxima temporada.

Los rivales de la formación de Brackley están descontentos con el equipo y, de hecho, dudan de la legalidad de unos entrenamientos que, por razones meteorológicas, se alargaron durante tres días. Ahora mismo la FIA está estudiando esta cuestión.

Aunque los test en temporada están prohibidos, se sobreentiende que Pirelli llamó a Mercedes con tal de contar con un monoplaza actual para comprobar la efectividad de las mejoras que presentarán en el Gilles Villeneuve, a principios del mes de junio. La escudería de Brackley está completamente convencida de que estos entrenamientos eran legales, pues el proveedor de neumáticos puede pedir la ayuda de un equipo para desarrollar sus productos si las circunstancias así lo aconsejan.

Sin embargo, otros dudan de su legalidad y consideran que Pirelli puede haber dado un trato preferente a Mercedes, una oportunidad de oro para optimizar el funcionamiento de los neumáticos, precisamente el gran punto débil de las flechas de plata desde el principio de la temporada.

Sí que es cierto que Ross Brawn había explicado que su equipo estaba trabajando más que nunca para solucionar el problema de la gestión de los neumáticos, pero el ingeniero británico se olvidó de mentar que su escudería había rodado en el Circuit de Catalunya.

"Hubo varias reuniones largas cuando regresamos de Barcelona y decidimos una forma de actuar. Ya se estaban haciendo muchas cosas, ahora no quiero crear la impresión de que se empezó a trabajar de repente cuando volvimos".

"Pienso que se ha reforzado el trabajo en las áreas que creíamos más relevantes y Bob (Bell) ha estado dirigiendo el equipo de ingeniería en estas dos últimas semanas para cerciorarnos de que permanecen centrados en aquello que creemos más importante", añadió.

La experiencia de disponer del equivalente de tres Grandes Premios de España extras sirvió a los de Brackley para decidir qué dirección tomar en el desarrollo de su máquina con tal de optimizar el trato que ésta brinda a los neumáticos.

"Hemos venido aquí con algunos cambios, pero juzgar esos cambios en Mónaco es casi imposible. Creemos que serán más importantes en Montréal, pero no será hasta que lleguemos a Silverstone que no podremos juzgar dónde estamos. Hay más cambios que intentaremos implantar de la mejor forma posible", concluyó.

PAUL HEMBERY RESPONDE

Minutos después de desatarse esta nueva polémica, el periodista Adam Cooper entrevistó a Paul Hembery en el paddock de Montecarlo. Hembery reveló que en el pasado ya invitaron a más equipos a este tipo de tests, pero que únicamente unos pocos mostraron su interés.

"Tenemos un acuerdo con la FIA que estipula que podemos hacer test de neumáticos de 1000km. Es algo que también teníamos en el Campeonato del Mundo de Rallyes. El año pasado escribimos a los equipos comentándoles esto, algunos respondieron, otros no. Algunos dijeron que sí, otros no respondieron".

"(Mercedes) era uno de los equipos que había dicho que lo harían. Se debe a eso. Estábamos en conversaciones con otros equipos para hacer más entrenamientos en el futuro", dijo sin revelar más detalles.

El director de Pirelli Motorsport también habló por el motivo por el que no se avisó al resto de escuderías de la celebración de estos entrenamientos. "Son nuestros test, es nuestro trabajo. Cuanto más se hable, menos se hará. Si empiezas a hablar, no lo acabarás haciendo hasta al cabo de seis meses", sentenció.

BRAWN SE DEFIENDE

El jefe del equipo Mercedes, ha admitido a la cadena Sky que el test fue propuesto por Pirelli para poner solución a los problemas de degradación y delaminación que están teniendo los neumáticos de los milaneses:

"Pirelli nos solicitó realizar una prueba de neumáticos porque estaban muy preocupados por algunos de los problemas que estaban teniendo y sentían que el coche que habían utilizado no era representativo. En su acuerdo con la FIA tienen a su disposición realizar una prueba de 1000 kilómetros de test con cualquier equipo. Consultamos a la FIA para tener claro que estaban de acuerdo y así fue", confesó Brawn, que también quiso dejar claro que no supieron en ningún momento que era lo que estaba probando Pirelli en dicho test:

"Cuando haces una prueba de neumáticos con Pirelli, no sabes lo que estás probando. Te dan códigos. Cada día se probó un lote diferente y seguimos sin conocer las conclusiones que se sacaron", continuó.

Además, la cabeza visible de Mercedes confirmó que el test no era, en ningún caso, secreto para los demás equipos ya que al realizarse tras el Gran Premio de España, el equipo no recogió su material como sí hicieron todos los demás:

"No era secreto. Mientras estábamos preparándonos para hacer la prueba, todos los otros equipos todavía estaban allí. ¿Por qué no vieron que nuestros camiones no iban a casa?. No hubo ningún intento de hacer una prueba secreta. Es decisión de Pirelli el informar a las personas si así lo desean. No es nuestra responsabilidad el avisarles".

FERRARI CELEBRÓ UNA SESIÓN DE LA CORSE CLIENTI

Si bien en un momento había trascendido el rumor de que Ferrari también había participado en las pruebas, finalmente se ha sabido que el V8 del Ferrari de 2010 que rugió en el Circuit de Catalunya formaba parte de la Corse Clienti.

Así pues, se trató de un cliente privado de la compañía de Maranello, que pagó para pilotar el coche de 2010 en una sesión completamente independiente de los entrenamientos de Mercedes y Pirelli.