El Grupo McLaren confirmó a principios de esta semana la inversión de 230 millones de euros por parte del multimillonario Michael Latifi, propietario de la empresa Nidala (BVI) Limited. El canadiense compró 888.135 acciones de la compañía, por lo que ahora cuenta con el 10% del total de la empresa.

Tras la operación, era imposible no relacionar la gran inyección económica con un posible futuro de su hijo, Nicholas Latifi, como piloto de McLaren. Sin embargo, desde la escudería aseguran que se trata de un movimiento completamente ajeno y sin relación alguna a la carrera deportiva del piloto de 22 años, actualmente compitiendo en Fórmula 2 y reserva de Force India.

“No tiene que ver con una conexión entre la inversión de Michael Latifi en McLaren y la trayectoria como piloto de su hijo Nicholas”, aseguró un portavoz de McLaren a la revista holandesa Formule 1.

El propio Michael había declarado con anterioridad que estaba interesado en realizar una inversión en McLaren porque admirada la personalidad y ambiciones de la marca, y que ve muchas oportunidades de crecimiento para el Grupo McLaren.