El propietario de Red Bull Racing, Dietrich Mateschizt, admitió que la temporada 2012 de Toro Rosso fue decepcionante, aunque también reconoció que es un equipo muy joven cuyos resultados no pueden comprarse con los de Red Bull. La escudería de Faenza anotó 26 puntos y acabó el año en el noveno lugar del Campeonato de Constructores.

"Toro Rosso es un equipo novato y sus objetivos difieren de los de Red Bull Racing", afirmó Mateschizt a Auto, la revista internacional de la FIA. La llegada de un nuevo director técnico, James Key, en sustitución de Giorgio Ascanell a mitad de temporada influyó en la progresión del equipo. "Pero eso no quiere decir que estemos contentos con el desarrollo del coche. Debemos encontrar mejoras importantes, las pedimos".

Daniel Ricciardo es optimista al pensar en el futuro, pues confía en que los bólidos de Faenza mejorarán en 2013. "Ese es el objetivo del equipo. El margen de mejora es enorme. James viene a bordo, ese es su objetivo y el principal motivo por el que ha venido al equipo. Con todo el debido respeto a lo que hicimos en 2012, tenemos más margen para ir hacia delante, así que definitivamente nos veo progresando", dijo en declaraciones a Autosport.