Renault optó por comprar el antiguo equipo Lotuspara volver a la Fórmula 1 a finales de 2015. Para hacerlo, tuvieron que pagar una suma total de poco más de un euro por el 90% de toda la estructura de Lotus. Sin embargo, tuvieron que hacerse cargo de sus deudas.

Según la contabilidad del propietario de Lotus (Gravity Motorsports) emitida el 31 de diciembre de 2015, el equipo británico registró pérdidas en 2015 por valor de casi 68 millones de euros. Su déficit en 2014 había sido de poco menos de 7 millones de euros.

En 2016 Renault ha podido rebajar esa deuda a 42 millones de euros, como cita el informe de su equipo estratégico: "El aumento de la pérdida económica relacionada con el número de puntos (en el mundial de Fórmula 1), en algunos casos no se consideran transacciones, por lo que se espera un mejor resultado en 2016. La reducción de patrocinio por la temporada", ha sido la causa de la rebaja de la deuda.

"En pista, el rendimiento mejorado se espera alcanzar en la segunda mitad de la temporada. Sin embargo, dado el hándicap por la falta de desarrollo durante la temporada de 2015, el equipo no espera mejorar la anterior posición final", en el campeonato de constructores, que para Lotus fue 6º en 2015.

Este 2016, Renault llega al ecuador del campeonato con los seis puntos sumados en el GP de Rusia como única referencia en su casillero, y ocupan así la décima posición en el mundial de constructores.