El Gran Premio de Gran Bretaña parecía estar en peligro de desaparecer del calendario a finales de 2016. El British Racing Drivers' Club (BRDC), dueño del circuito británico, amenazó con activar la cláusula de ruptura para terminar su contrato tras 2019. Bernie Ecclestone se negó a renegociar y la llegada de Liberty Media llenó de esperanza a los propietarios del trazado para poder cambiar las condiciones del contrato.

El director de la asociación John Grant se reunió con Chase Carey durante el Gran Premio de España, pero todo parece indicar que no habrá renegociación del contrato. “No lo vamos a hacer. Valoramos Silverstone y queremos que la carrera sea un éxito, por lo que trabajaremos con ellos para lograrlo. Aunque no renegociaremos acuerdos que se decidieron satisfactoriamente entre ambas partes. Silverstone logró tener beneficios el año pasado”, declaró el director ejecutivo de Liberty a The Mail.

A pesar de decir no a la renegociación, Silverstone está en una posición importante dentro del plan de Liberty de mantener los Grandes Premios históricos dentro del calendario sobre todo por la falta de alternativas. Aunque se habló de una posible carrera urbana en Londres, es posible que esta propuesta no salga adelante en un futuro cercano.