Aunque siempre criticado por su rendimiento, Lance Stroll es uno de los pilotos que suele destacar cuando las condiciones de pista se vuelven más delicadas. Lo hizo en la sesión de clasificación de este sábado, con los ultrablandos en pista húmeda, metiéndose en Q2, superando a rivales teóricamente más rápidos, así como a su compañero de equipo.

Pero en la Q2, Stroll falló. Sufrió un trompo que le envió contra las barreras. Un golpe ligero que no impidió que incluso volviese por sus propios medios a boxes, pero que sí tuvo como consecuencia la rotura del alerón delantero, desafortunadamente para sus intereses, la única pieza que Williams había tenido lista para Hungría.

De esta forma, igual que le ocurriese a Fernando Alonso y McLaren en Austria, el equipo ha tenido que montar un alerón delantero distinto, rompiendo de esta forma el régimen de parque cerrado que se levanta al comienzo de la clasificación.

Al romper el parque cerrado, el piloto es sancionado teniendo que salir a carrera desde boxes, como así lo ha ratificado ya oficialmente Jo Bauer, delegado técnico de la FIA.

Text, Font, Line, Document, Number, pinterest