Así, el alemán lanzo un grito al viento de libertad, 'free at last' y afirmó lo siguiente, respecto a los cambios 'de tutelaje' surgidos en la actual temporada: "Todo el mundo en casa me dijo, que parecíamos marionetas movidas por nuestros ingenieros a través de la radio, pero eso ha dejado de ser así ahora". Evidentemente se refería a las restricciones de las comunicaciones vía radio, aunque me da que algunos, lo que cambiaron fue la jerga, la manera de decir las cosas. Bien es cierto, que se farfulla menos, que el tiempo que los pilotos deben estar atentos a los que se les comenta o comentan al box, se ha reducido. Pero en los GPs ya disputados, hemos oído cosas muy raras, respecto a problemas de frenos o consumo, luego no vistos, de posibles daños, mientras el monoplaza llegaba segundo a la meta. En suma, que según Nico "ahora estamos más a nuestro aire". Pero también en ese mismo aire se respira lo muy usual en la Fórmula 1, 'hecha la ley… maquinación asegurada'.

Sigue sin saberse los motivos exactos del descenso a Toro Rosso de Daniil Kvyat. Christian Horner, evidentemente, negó que la carrera en el trazado de Sochi, tuviera algo que ver. "Creo que el accidente en Rusia, mucha gente lo vió como el detonante: pero se tuvieron en cuenta muchas más cosas que las sucedidas aquel domingo por la tarde. Tenemos mucha información de estos chicos y no fue una decisión que tomáramos a la ligera. Tuvimos en cuenta una gran cantidad de factores como las opciones a largo plazo y el futuro de Red Bull en referencia a sus pilotos". Tras estas vagas afirmaciones, de nuevo, soltó el consabido 'rendimiento del piloto'. Yo enseguida pensé en otro 'rendimiento', éste, ante el entorno de un joven piloto holandés, que por el momento ganar, lo que se dice ganar un campeonato 'grande' antes de su arribo a la F1, pues ninguno, salvo la carrera del Masters de Fórmula 3 con el equipo Motorpark en 2014. ¡Qué corto bagaje verdad, e incluyo la reciente carrera de Montmeló!

Con alevosía, cerca de la nocturnidad y con penalty injusto, todo esto concurrió en el descenso de categoría de Daniil. Luego Marc Surer, tiró por los cerros del ajedrez para resumirlo así: "Red Bull solo necesitaba una excusa y Kvyat se la dio. Creo que fue un peón sacrificado", dijo el suizo. Anteriormente había precisado respecto a lo sucedido en el giro uno del GP de Rusia que "este tipo de incidente al principio de una carrera, le puede pasar a cualquiera". Para colmo de males del joven nacido en Ufá, llegó lo presenciado en la pista de Barcelona-Cataluña. Allí dos plateados Mercedes, se empreñaron en concluir la prueba de inicio, curva cuatro. También Ferrari hizo luego una pésima gestión de los pit stop. Lo mismo vimos seguidamente con los de Christian Horner, que se empeñaron en arruinar la carrera, solo, de Daniel Ricciardo. Dado que el australiano se llama Daniel, no digo más, y 'al conocer' a Helmut Marko, yo aceleraría la búsqueda de equipo antes de que puedan enviarle a la escuela, la de pilotos de Red Bull.

Bernie Ecclestone comienza a no fiarse ni de su sombra. Son muchos años moviendo los hilos de la Fórmula 1, algo que lógicamente genera rivales, gentes que pueden desear tu trono antes o después. Rumores hablan de un tridente formado por las escuderías Mercedes, RBR y Ferrari, las que piensan en un sustituto de consenso; Niki Lauda. Cuando al austriaco le preguntaron, durante el pasado fin de semana, por la veracidad o no de esta cuestión, la respuesta incluyó tajantemente dos palabras: vaca, más un producto derivado de las mismas con el que antiguamente se abonaban los campos, pero en inglés. Más tarde Bernie, que seguía con la mosca tras de sí, confesó en voz baja: "No sé. Creo que tratan de hacer algo, traman algo probablemente, pero no sé sobre qué conspiran". Martin Brundle tuvo, claro está, que opinar sobre la supuesta intriga diciendo: "Tienen más posibilidades de ser alcanzados por un rayo". ¡Veo complicado ese relevo, ante un ser perenne y perpetuo como Ecclestone!

Todo era armonía, paz y sosiego en el equipo Mercedes desde hace mucho tiempo. Lewis Hamilton consiguió su tercer entorchado en 2015, para luego dejar paso a las tres victorias seguidas de Nico Rosberg al final de la temporada. Al comenzar esta, nueva racha consecutiva de '25' de Nico, cuatro plenos seguidos, mientras Lewis ponía morritos al no rularle del todo bien el buga, aunque con dos '18'. Pero fue apagarse los semáforos en la pista de Barcelona, y una vez pasada la curva tres, zafarrancho de combate, con ROS en cabeza. El germano entonces 'closed the door' y se fue totalmente a la derecha para obstruir el paso a su compañero. Este en plan 'yo te adelanto hasta por el pasto', siguió por allí obstinadamente. Lo siguiente fue que el Mercedes del británico se descontroló y arrastró hacia la escapatoria de la curva cuatro a ambos bólidos. Toto Wolff declaró después: "Les vamos a dejar correr igualmente". Pues o pone allí orden, u órdenes, o factura millonaria de coches estrompados.

El todo o la nada, el blanco o el negro, la gloria o el precipicio. Así parecen ser los tiempos modernos, donde el término medio no tiene cabida. La mesura ha dejado paso a una especie de apremio, celeridad, prisa o urgencia máxima, por encumbrar o derribar sin más contemplaciones. Por ello imagino que el ex piloto de Fórmula 1, Ivan Capelli, quien anduvo enrolado en escuderías como AGS, Leyton House Racing, March o Ferrari, aventuró el abismo para la carrera de un joven ruso, tras solo un gran premio disputado en su 'nuevo' equipo, la Scuderia Toro Rosso. "Tengo que decir que Kvyat se enfrenta al abismo, al igual que muchos, muchos otros conductores antes
de él", confesó el nacido en Milán, año 1963. Nada dijo luego sobre la importancia capital del coraje que algunos pueden demostrar en los momentos más difíciles, pues fuera de RBR, de llegar a pasar, también hay vida. Kvyat por su parte fue nítido: "Sé de mi potencial y no me importa lo que piensen los demás". ¡Bien por este joven!

Eric Boullier, team manager de McLaren, tiró por el camino recto, 'atrochando', con el ánimo algo desbocado, aún tras lo visto en Barcelona, poco, con abandono de Fernando Alonso y la novena plaza de Jenson Button. Lo anterior viene a cuento por lo siguiente: "Mediante un estudio de los datos, vemos que estamos en algún lugar entre Mercedes y Ferrari en lo referente a potencia. El progreso lo perciben claramente los pilotos y también lo puede apreciar todo el mundo. Así que estamos en el camino correcto", dijo el francés. Yo me quedé sobre todo con lo de 'en algún lugar', pues lo del 'entre' no me cuadra por muchos datos que apilen y luego analicen. Es indudable que la PU de Honda ha mejorado en potencia y fiabilidad, más en lo primero que en lo segundo. Pero de ser precisos, están a un mundo de la demostrada por las que propulsan a Mercedes y algo menos a la de Ferrari. A lo de estar en el camino correcto, nada que objetar, pero aún será largo, tortuoso y nada sencillo de recorrer.