Bajando la S de Senna, Sebastian Vettel se dispone a adelantar a un Toro Rosso, concretamente el de Jean-Eric Vergne. Ya en la recta posterior, la maniobra se produce mientras los paneles luminosos amarillos parpadean, y antes de la luz verde. La polémica, desatada por los medios de comunicación, estaba servida, pues Vettel no recibió penalización alguna, pero la FIA ha contestado esta mañana a la petición de aclaración de Ferrari que la maniobra fue legal, pues las banderas prevalecen sobre los paneles luminosos y había una bandera verde ondeando antes de realizarse el adelantamiento.

Ahora Bernie Ecclestone se une a esta teoría, y trata de destruir toda polémica que empañe el tricampeonato de Sebastian: "Es una pena", declara sobre el asunto a The Telegraph, "pues todo estaba yendo tan bien… Ha sido una gran carrera, un gran campeonato. Ahora todo el mundo habla sobre esto. El problema es que nadie sabe lo que está pasando".

Y lo que está pasando, según Ecclestone, es nada: "No va a pasar nada. ¿Qué van a hacer? ¿Emprender acciones civiles? Quizá. Pero el caso está perdido de antemano. No va a pasar nada". En cualquier caso, el magnate de la F1 considera que la queja de Ferrari llega demasiado tarde.

"En las reglas normalmente hay que protestar. Ellos perdieron su oportunidad", alega sobre la tardanza de la Scuderia en pedir una aclaración sobre los hechos. "Además, se mostraron banderas verdes, algo que nadie puede negar. Todo es una broma. Lo que dicen en su carta está mal. No creo que necesiten tomar ninguna acción. Está completa y totalmente equivocado".

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