La aclaración de la FIA sobre el uso de los retrovisores como elementos instalados en el ‘halo’ solo ha tardado dos semanas en tener efecto sobre los equipos de Fórmula 1. La primera estructura que ha instalado los espejos en la protección ha sido Ferrari, que en el Gran Premio de España contará con una nueva posición de retrovisores y también ha incorporado una serie de elementos aerodinámicos.

Con los numerosos sucesos que ocurrieron durante la caótica carrera de Azerbaiyán todavía candentes, sobre todo con respecto a los restos que se quedaron en la pista tras los diferentes incidentes y causaron el pinchazo de Valtteri Bottas, el añadido de estos elementos al ‘halo’ han empezado a causar preocupación por motivos de seguridad. En este sentido, la FIA se ha pronunciado sobre el uso de estas piezas afirmando que estarán pendientes de sus posibles inconvenientes.

“Si hay algo que se permita instalarse al coche y pensamos que podría resultar en restos que se queden en la pista, lo pararíamos. Somos conscientes de la dificultad que conlleva porque cualquier contacto puede dejar suciedad en el circuito. Si vemos algo con lo que no estamos contentos, entonces lo pararemos”, comentó Charlie Whiting.

“Los equipos sacarán esto adelante si saben que suponen unas mejoras aerodinámicas. Es su responsabilidad conocer si hay unas potenciales mejoras. Habrá algunos elementos grandes en algún lado que los equipos utilizarán. Es su responsabilidad usarlos correctamente”, afirmó Nikolas Tombazis.