La Fórmula 1, con la ayuda de eSports, ha comenzado a trabajar en una nueva configuración que realiza simulaciones de parrilla para probar la implantación de ciertos cambios en la misma. El objetivo principal es que se produzcan más adelantamientos y menos accidentes.

Los máximos responsables de la competición, Liberty Media, ha encargado la tarea de la nueva configuración a Pat Symonds, director ejecutivo de ingeniería de la F1: "Queremos tomar decisiones basándonos en pruebas. Nos preguntamos qué pasaría si acercáramos los coches en parrilla y los pusiéramos uno al lado del otro, quizás no en filas de tres o cuatro, sino de dos o dos".

"Cuando quieres simular algo así, si lo tratas como un problema físico, obtienes una respuesta trivial: si acercas los coches más y todos aceleran a la vez, llegan a la primera curva más cerca los unos de los otros. Eso no es lo que quieres saber. Lo que quieres saber es lo que va a pasar, así que construimos una simulación que usa inteligencia artificial, pero también podemos probar con personas", dijo Symonds en declaraciones para la publicación británica Autosport.

Con la nueva configuración de la F1, Symonds asegura que se trabaja con 19 coches controlados artificialmente y uno controlado por una persona, que realizan 50 carreras de dos vueltas: "Así se analiza estadísticamente cada posición de los coches en todo momento, así que podemos decir 'cuando hicimos esto, tuvimos un 3% más de accidentes, tuvimos un 5% más de adelantamientos y un 20% más de pilotaje en paralelo'".

"Queremos huir de esos días y trabajar de una manera más científica", aseguró el británico para concluir.