Lewis Hamilton parecía que iba a ser imbatible en el Gran Premio de Australia. Después de conseguir una espectacular pole, el piloto británico tenía todas las papeletas para hacerse con la primera victoria de la temporada, pero no contaba con un Virtual Safety Car que podía trastocar por completo sus planes. En Ferrari supieron jugar sus cartas y Sebastian Vettel se convirtió en el sorprendente ganador de la carrera gracias a una arriesgada maniobra estratégica.

Hamilton solo pudo limitarse a ver cómo el alemán salía de boxes por delante de él durante el periodo de coche de seguridad virtual, momento en el que se le escapó la victoria. Esta derrota en un fin de semana en el que el piloto de Mercedes era el principal favorito podría suponer un golpe psicológico para Hamilton, según afirma Jolyon Palmer en su columna de la BBC.

“Mercedes tenía el ritmo en Australia y Hamilton lo hizo todo bien. Tenía la carrera bajo control, pero no ganó. Para empeorar las cosas, su principal rival y también tetracampeón del mundo fue el que ganó. Será doloroso para Hamilton. Tener un fin de semana perfecto y perder una carrera por elementos fuera de su control es un escenario de pesadilla”, comentó el expiloto de Renault y ahora analista para la cadena británica.

“Como piloto, hay muchas preguntas que quieres hacer a tu equipo para darte cuenta de cómo salieron las cosas mal, pero esta definitivamente se debe a la mala suerte. Si Hamilton hubiera sabido antes que la distancia con Vettel era tan grande, entonces hubiese podido apretar y reducirla un poco antes del coche de seguridad virtual, pero eso fue lo que decidió la carrera. Para Vettel y Ferrari, esta victoria les dará mucha motivación y energía para el resto del año”, añadió Palmer.

El británico recomienda a su compatriota reaccionar a tiempo para no quedarse atrás con respecto a Vettel. “A lo largo de los años, hemos visto altibajos de Hamilton y muchas reacciones diferentes. Tras la carrera, más allá de la decepción inicial por la derrota, parecía positivo y dispuesto a aprender con el equipo para asegurarse de que no vuelva a pasar. Ha madurado mucho y se ha vuelto un piloto más fuerte, más duro de batir que nunca. Tiene que responder de la mejor manera posible en Bahréin”, explicó.