Robert Kubica espera que la cobertura de los medios de comunicación sobre el accidente de Michael Schumacher siga siendo respetuosa con su familia y amigos, ya que advierte que los juegos de los medios de comunicación es duro.

Igual que el siete veces campeón del mundo de Fórmula 1 que sigue en el Hospital Universitarios de Grenoble en coma inducido y en estado grave, Kubica también luchó por su vida tras un horrible accidente en febrero de 2011. El antebrazo del piloto polaco quedó muy dañado en su accidente de rally, y sufrió múltiples fracturas en su brazo, en el hombro y en las piernas.

"Yo estuve en una situación similar y sé que los medios de comunicación pueden jugar a un juego muy duro en un periodo muy difícil para él, para sus familiares y amigos cercanos” afirmó Kubica.

El accidente de Schumacher en la estación de esquí de Meribel el pasado domingo está recibiendo una enorme cobertura de los medios de comunicación de todo el mundo, incluso se afirmó que un periodista disfrazado de sacerdote intentó colarse en la habitación del piloto alemán.

"Es una noticia muy dura y demuestra que puede suceder algo todos los días. Cuando tuve mi accidente en el rally de coches la gente decía que por qué estaba haciendo eso, que no debía. Pero cuando te gusta algo deseas hacerlo", reconoce Kubica, en referencia a los peligros no tan solo del esquí sino de la vida cotidiana, que un fatalidad de cosas pueden desembocar en un accidente terrible.

Robert Kubica se unió también a las muestras de cariño y le desea una pronta recuperación al alemán: "Le deseo todo lo mejor y sin duda mantener los dedos cruzados que se recuperará y todo saldrá bien", concluyó.

Esta temporada Robert Kubica competirá en el WRC a los mandos de un Ford M-Sport y actualmente está participando en la prueba inaugural del Campeonato de Europa de Rallyes (ERC) este fin de semana en Austria.