El piloto británico Jordan King se ha propuesto como reto llegar a la Fórmula 1 en 2017. El mismo ganó la Fórmula 3 británico en 2013, tras disputar una impresionante temporada en la GP2, además, le nombraron ganador del premio Piloto del Instituto de la FIA 2015 por la Academia de Excelencia de Jóvenes Pilotos.

Jordan asegura que no tiene modelos en los que fijarse en las carreras. "Eso no es decir que no admiro todo lo que los pilotos punteros han conseguido. Pero mi plan es competir con ellos y ser su rival. No puedes hacer eso si los pones en un pedestal y les demuestras demasiado respeto. El plan es conocerles en la pista y vencerles", declara para el diario británico The Mirror.

Jordan, hijo del ex CEO de la famosa cadena de supermercados británicos Sainsbury, Justin King, comenzó a competir en el karting de niño. El mismo explica que la GP2 es el entrenamiento perfecto para la F1, además, de ser algo que te puedes permitir en mayor medida.

"El coste de rodar en un coche de F1 es enorme. En GP2 tenemos que usar el mismo chasis, motor y proveedor de neumáticos, así que la habilidad del piloto afortunadamente pasa a primer plano. En F1 puedes depender mucho del equipo por muy buen piloto que seas. Los frenos en la F1 están hechos de carbono. Son impresionantes. Puedes ir a 200 km/h en un coche de F1 y parar por complete en 2,9 segundos", continúa.

Para llegar al Gran Circo, King espera tener este año otra temporada exitosa. "Nunca puedes saber seguro lo que pasará pero las señales son buenas. Hemos estado en el extranjero probando los coches y las cosas pintan bien. El objetivo es estar en F1 en 2017, así que el plan es tener una gran temporada y ver a qué lugar podemos ir desde ahí", completa.