El ex piloto de Fórmula 1, Edmund 'Eddie' Irvine, ha hecho balance del primer gran premio de la temporada, en el que Sebastian Vettel salió triunfador. Irvine define al alemán como"un mocoso engreído y arrogante. Cuando llegó a la Fórmula 1 con toda la admiración que le rodeaba, su narcisismo se encendió y empezó su arrogancia", declara para Motorsport-Total.

Lo compara incluso con su compatriota Michael Schumacher: "Lo que pasa es que Vettel es un buen piloto, pero Michael estaba a otro nivel. Todo el mundo sabía que Michael estaba en un nivel diferente, pero ahora habría que elegir quién es el mejor: Vettel, Alonso o Hamilton, y este último sería el que yo escogería, teniendo en cuenta mi gusto personal".

Compañero de equipo del 'Káiser', Irvine sigue teniendo palabras de elogio: "Veía a Michael hacer cosas importantes con el coche, cosas que yo no podía y que nadie más ha podido hacer. En mi época estaba Mika Hakkinen, que parecía el mejor de todos, pero Michael fue de nuevo el mejor".