Nico Hulkenberg mide 1,85 metros de alto y calza un 43 de pie. Su gran envergadura ya supuso un problema en los test de Jerez. Allí para salvar la situación recortó tanto la punta como el talón de sus botas para que sus pies llegaran correctamente a los pedales.

El propio Hülkenberg presentó la solución adoptada en el Circuit de Catalunya a Auto Motor und Sport: "El problema era que no teníamos el tamaño de bota correcto. Ahora tenemos las que tocan y encajan a la perfección. No tuvimos que cambiar el chasis".

El último caso parecido que nos viene a la memoria fue el de Alexander Wurz cuando en 2005 era piloto probador de McLaren. El austriaco no pudo sustituir al lesionado Juan Pablo Montoya en el GP de Bahrein de esa temporada porqué no entraba en el cockpit del MP4-20. Los técnicos de Woking habían diseñado el monocasco a la justa medida de Montoya y Raikkonen. Su lugar en carrera lo ocupó el otro probador del equipo británico, Pedro Martínez de la Rosa.