Las condiciones meteorológicas que la Fórmula 1 se ha encontrado en Barcelona durante la primera semana de test de pretemporada han avivado el debate sobre un posible cambio de escenario para el año que viene. Algunas personalidades dentro del paddock han sugerido realizar los test en zonas cálidas para Bahréin para asegurarse un buen clima durante las semanas de pruebas antes del comienzo de la campaña.
Christian Horner considera que el ahorro de costes asociado a viajar a un circuito europeo para llevar a cabo los test es insignificante cuando no se puede rodar debido al mal tiempo. “¿Quedarnos sentados en la nieve? Bueno, en cualquier sitio se estaría mejor. Vinimos aquí por razones de costes. Es más barato que enviar el material y la gente a Bahréin, pero no rodar te acaba costando dinero en términos de falta de desarrollo y de oportunidades para arreglar fallos”, declaró el jefe de equipo de Red Bull.
Organizar los test en Bahréin supondría unos costes significativamente mayores para los equipos en comparación a probar en Europa, pero Horner afirma que valdría la pena invertir más dinero en viajar a un país más cálido teniendo en cuenta el número de pruebas que podrían realizar. “Si hubiera alguna oportunidad de ir a un clima más caluroso el año que viene, la aprovecharía”, comentó.
“Es una compensación teniendo en cuenta la falta de rodaje que hemos tenido esta semana y la habilidad de solucionar problemas que podrían pillarte por sorpresa en las primeras carreras. Solo hay ocho días de pruebas, un privilegio. Son cuatro días por piloto y ahora hemos bajado a tres y medio. No hay otro deporte en el que tengas tan pocos días de entrenamiento antes de empezar un torneo importante”, señaló Horner.
