Romain Grosjean se va de Austria con un buen sabor de boca. El piloto de Haas consiguió su mejor resultado del año en el Red Bull Ring tras cruzar la bandera a cuadros en sexto lugar.

Tras varias carreras en las que el francés venía sufriendo con los frenos de su monoplaza, hoy ha sido capaz de obtener unos puntos muy valiosos, tanto para él como para su equipo.

"Desde el principio nos sentimos cómodos con el coche. Hemos trabajado un poco en los frenos, lo cual me dio confianza. Esta configuración aerodinámica es mucho más positiva. Fue más complicado en las largas rectas de Montreal o Bakú, pero aquí en curva iba mejor", señaló a Canal+ Francia.

De ese modo, el piloto galo pasa página tras un esperpéntico GP de Azerbaiyán hace dos semana, donde el de Haas cruzó la bandera a cuadros como último clasificado y donde se quejó más que nunca de los problemas de frenos de su vehículo, asegurando que llegó a "temer por su seguridad".