Más de 45 años manteniendo una de las colecciones de vehículos de carreras más espectaculares (y grandes) del mundo, un no parar de añadir icónicos vehículos, que hora, desafortunadamente, dejará de ser visitable por el gran público. El museo de vehículos de carreras de Donington, cierra.
Se inauguró en un ya lejano 16 de marzo de 1973 gracias al empuje de Frederick Bernard Wheatcroft, que siempre contaba que comenzó la colección comprando un Ferrari de Fórmula 1 de 1964, vehículo que ya contaba con 13 años, y desde entonces, fue un no parar.
El ideólogo del museo, que nació como un primer paso para revitalizar el entonces abandonado museo de Donington, falleció en 2009, encargándose desde entonces su propio hijo, que ahora admite que las responsabilidades familiares le aconsejan el cierre de un centro deficitario.
El centro ha fechado el cierre definitivo para el próximo 5 de noviembre, siendo visitable hasta entonces a un precio de 12 libras.
