Liberty Media ha cambiado la imagen de la Fórmula 1 desde su llegada al Gobierno de la categoría. La marcha de Bernie Ecclestone terminó con una etapa del deporte que estaba lejos de integrarse en el mundo globalizado. Desde el cambio del histórico logo a un acercamiento de los pilotos hacia los aficionados en los circuitos, la mano de Liberty es evidente y su presidente, Chase Carey, saca pecho.
“Es muy temprano para celebrar. Pero es interesante que en Alemania se acercaron a a mí algunas personas y me dijeron que fue más divertido que hace dos años”, afirma Carey a La Gazzetta dello Sport. “Estamos en el buen camino para mejorar el espectáculo dentro y fuera de la pista. Hemos visto grandes carreras y la lucha por el Mundial está muy emocionante”, añade.
La estrategia de Liberty pasa por devolver a los pilotos la identidad de héroes, una característica que marcó a los pilotos de la segunda mitad del siglo XX. Lo cierto es que ahora son más accesibles al público, con multitudinarias firmas de autógrafos y espectáculos ante los aficionados durante todo el fin de semana en los circuitos.
“La Fórmula 1 tiene que ver con héroes, que estimulan la imaginación de las personas, al igual que en las películas. Aquí tenemos marcas sólidas y excelentes de equipos, pero en última instancia con los pilotos quienes desempeñan el papel principal en este deporte”, concluye.
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