Después de unos primeros entrenamientos libres con actuaciones muy discretas por parte de ambos pilotos de McLaren, la nube negra de la falta de fiabilidad ha vuelto a estar presente en el garaje del equipo británico. Fernando Alonso se ha visto obligado a detenerse en la pista después de que sus ingenieros descubrieran una serie de problemas relacionados con la presión de agua del ERS de su coche. Al mismo tiempo, el automóvil de Jenson Button se ha encontrado con un problema de temperatura del área del escape del monoplaza.

Alonso sólo ha podido completar 44 vueltas entre ambas sesiones de entrenamientos. Su mejor resultado fue el 11º lugar en los Libres 2; sin embargo, el asturiano ha vuelto a ser protagonista, pero fuera de la pista, después de aparcar su coche, ha ocupado el puesto del operador de la cámara y ha sido el centro de atención de la parte final de los entrenamientos.P or otro lado, el español ha explicado que aún deben analizar la anomalía que detectaron por medio de la telemetría, aunque ha informado que reemplazarán su unidad de potencia, por lo que el fallo de hoy no le afectará.

"Vimos hoy que parecemos ser un poco más competitivos aquí que en algunas de las carreras anteriores y creo que hay una posibilidad de llegar a la Q3 mañana. En la segunda sesión, tuve que parar el coche debido al hecho de que había una anomalía en los datos de presión del agua del ERS. Vamos a cambiar el motor de todos modos para mañana, por lo que este tema no me afectará en absoluto para el resto de mi fin de semana. Con las altas temperaturas que teníamos hoy, creo que todos sufrieron por la falta de agarre y degradación, pero parece que el tiempo va a cambiar, con algunas temperaturas más bajas, nubes y lluvia. Eso podría ayudarnos. Mañana tenemos que tener una buena sesión de clasificación, eso es muy Importante porque adelantar aquí puede ser bastante difícil”, ha especificado Alonso, quien disputa su GP número 273.

Con 46 vueltas completadas y un mejor décimo lugar como mejor resultado, Button ha lamentado el fallo de fiabilidad de su monoplaza ya que, como consecuencia, aún quedaba trabajo por hacer, sobre todo en la puesta punto con alta carga de combustible y en el entendimiento de las gomas.

"Con combustible bajo, el coche no se sentía mal, era relativamente divertido pilotarlo. El equilibrio todavía necesita un poco de trabajo con alta carga de combustible, pero no conseguimos avanzar mucho con eso porque tuvimos un problema con el escape, y tuvimos que parar, es una lástima porque necesitamos esa información, particularmente para nuestra comprensión del rendimiento del neumático blando. Afortunadamente, el problema en mi coche debe ser muy fácil de resolver. Ojalá podamos correr mucho mañana, lo necesitamos. Con las temperaturas más bajas previstas, la clasificación debe ser divertida. Llegar a la Q3 será difícil, pero ese debe ser nuestro objetivo. Para la carrera en sí, me gustaría que el tiempo se solucione y llueva”, ha comentado el campeón del 2009, que encara su penúltimo GP antes de pasar a un segundo plano dentro del equipo.

Pese a la frustración, Eric Boullier, jefe del equipo, se ha mostrado optimista por los avances logrados durante el tiempo en que ambos coches pudieron rodar en la pista, el francés confía en que las condiciones climáticas del resto del fin de semana, ayuden al equipo a conseguir un mejor resultado el domingo, además, ha destacado que las pruebas realizadas hoy, son fundamentales para la preparación del coche del 2017.

"Fue frustrante ver a ambos coches pararse en rápida sucesión, en particular porque significaba que no podíamos completar nuestro plan propuesto al final de la segunda sesión de entrenamientos libres. Si se mira de manera pragmática, es mejor que estos problemas ocurran durante los entrenamientos libres en lugar de en la clasificación o la carrera y estoy seguro de que vamos a poderlos resolver antes de las sesiones de mañana. Además, con condiciones mixtas y lluviosas previstas para el resto del fin de semana, el allo de hoy puede que no tenga muchas consecuencias al final de la carrera del domingo. En una nota más positiva, hemos sido capaces de completar un programa exhaustivo de pruebas esta mañana, que funciona a través de ejercicios de correlación y evaluaciones de elementos de prueba, lo que debería resultar útil para nuestro conocimiento y comprensión del coche del próximo año. Vamos a tener un poco más de trabajo por hacer durante los entrenamientos libres de mañana, pero hemos realizado un comienzo positivo para el fin de semana de carrera", ha asegurado.

Yusuke Hasegawa, jefe del proyecto de Honda en la Fórmula 1, ha insinuado que la elevada temperatura de la tarde en Interlagos pudo ser la causante de los fallos presentados en ambos coches, sin embargo, no cree que dicho problema pueda afectar al equipo el resto del fin de semana.

"El viernes en Interlagos comenzó suavemente, con continuas pruebas aerodinámicas, por lo que pudimos reunir más datos para uso futuro. Las condiciones de sol en la pista rápidamente subieron las temperaturas de la tarde, la presión de agua del ERS de Fernando tuvo problemas, así que optamos por detener el coche. Los ingenieros en el coche de Jenson detectaron un aumento de temperatura en la caja de cambios y en la zona del escape, así que metimos el coche en el garaje. Investigamos ambos fallos, pero creemos que ninguna debería afectar nuestro programa previsto para mañana", ha matizado el japonés.