El final de la temporada 2012 estuvo marcado por el final de un ciclo para Toro Rosso, lo que supuso un cambio de pilotos y la marcha de Sébastian Buemi y Jaime Alguersuari. Dos caminos paralelos, pero con diferente destino, ya que mientras Buemi tuvo la oportunidad de seguir enrolado en la escudería Red Bull, como piloto de pruebas al cargo del simulador, Alguersuari salió de la Fórmula 1, rumbo a la Fórmula E.

Tres años después la situación no cambia en Red Bull ni para Buemi. El joven suizo ha encontrado un lugar en la categoría eléctrica, en la que cosecha buenos resultados, pero no pierde su contacto con la F1 ni con los de Christian Horner, pues sigue con el trabajo de simulador, a pesar de la llegada de Pierre Gasly.

"Sé que Gasly ha dicho que es el tercer piloto, pero sigo aquí, y piloto mucho en el simulador. Por lo qué, esto sigue así", comparte Buemi.