McLaren aterrizó en Australia con el objetivo de meterse en la pelea para liderar la zona media de la parrilla. Los entrenamientos libres dejaron una tremenda igualdad en la ‘segunda visión’, pero el equipo de Woking no parecía estar en condiciones de batallar al frente de este grupo, pues sus pilotos no consiguieron aparecer por el top 10. Más preocupante parecía la situación de Lando Norris, quien solo podía superar a los Williams.
Los papeles de Carlos Sainz y Norris se intercambiaron en la clasificación. El madrileño quedó eliminado en la Q1 tras encontrarse al Williams pinchado de Robert Kubica en el tercer sector de su vuelta rápida, mientras que el británico consiguió pasar el corte. Norris fue la única baza de McLaren en la Q2 en su primera clasificación en Fórmula 1, pero el joven piloto superó las expectativas.
No solo Norris logró meterse en la Q3 en su debut, sino que fue capaz de superar a Sergio Pérez y Kimi Raikkonen para colocarse en la octava posición de la parrilla. Solamente los Haas terminaron por delante del británico en la igualada zona media, lo que otorga a McLaren serias opciones de marcharse de Melbourne con un buen puñado de puntos para comenzar la temporada.
“He disfrutado la clasificación hasta cierto punto, pero estaba tan nervioso que la diversión se redujo un poco. Pero llega una vez se completa una vuelta con la que estaba contento. Estoy feliz por todo el equipo. Están trabajando muy duro y ha salido todo bien en clasificación. Lo he disfrutado mucho. Hice tres tandas y usé tres juegos de blandos en Q1 porque nuestro objetivo era entrar en la Q2”, declaró Norris a Sky Sports.
“Entonces completé mi vuelta de Q2 y me metí en la Q3. Estoy muy contento, pero queda mucho trabajo mañana. Esto demuestra que es posible hacerlo y que hemos mejorado con respecto al año pasado. No tanto como necesitamos, pero siento que hemos maximizado todos. No me quejo, pero tenemos una carrera larga mañana y hay que trabajar para mantener estas Q3”, añadió.
