La iniciativa se puso en funcionamiento la pasada temporada para distinguir a los neumáticos slick y muchos señalaron que hubiese sido mucho mejor una línea blanca porque ofrecía una mejor visibilidad. Pero Bridgestone se negó. "Hemos utilizado el color verde como muestra de nuestro apoyo a la campaña FIA Makes Cars Green", apuntó en su momento Tetsuro Kobayashi, jefe técnico del distribuidor de neumáticos.

Bridgestone también ha anunciado que ya no habrá un "salto" entre los componentes de los neumáticos, sino que en algunas carreras ofrecerán componentes consecutivos dadas las críticas recibidas en 2009. "No era posible en algunas carreras como Mónaco, donde era importante tener compuestos blandos consecutivos (por ejemplo, súper blando y blando) para garantizar el máximo agarre al asfalto", añade Kobayashi.

Los nuevos neumáticos serán más estrechos que los de 2009 para garantizar la estabilidad del monoplaza y se reducirán de 14 a 11 los juegos de gomas asignadas a cada piloto.

La compañía japonesa anunció al final de la temporada pasada que 2010 sería su último año en la competición como distribuidr de neumáticos de F1. Sin embargo, las últimas informaciones hablan de que la FIA podría convencer a la compañía para permanecer más allá de este año. (GMM)